Necesidad Enfermiza●Emmett Cullen●

Capítulo 16

Definitivamente no es nada fácil. Alice llevaba horas tratando de poner los floreros, sin embargo, la pequeña niña quería ser cargada por ella. Y una vez Alice le ponía atención la niña se calmaba.

Así que hicimos turnos para ayudar a Alice mientras ella decoraba. El pequeño no se ha despegado de mi desde hace dos días que llego. Me he dado cuenta que es un poco mucho más tranquilo que sus hermanas las cuales les gusta correr y huir de nosotros.

Sin embargo yo también tenia mis responsabilidades con la manada. Y hoy me tocaba hacer guardia, pero había un problema. Ciertos coyotes no me dejaban ir. Emmett tuvo que manipularlos con puré y leche para dejarme ir.

Paul llevaba burlándose de mi toda la tarde. Dice que ya soy papá y que ya se lo que se siente tener un niño a tu alrededor. Es un dramático. Aunque no miente.

-iran a la boda?- les pregunte. Jake suspiro.

-iremos- aseguró Seth con una sonrisa. Jake no dijo nada más tampoco lo nego.

-solo por la comida- dijo Paul comiendo una bolsa de papas. Yo rode los ojos.

Era de esperarse.

-bien yo los dejo, tengo tres demonios que cuidar- susurre tomando mi forma de lobo. Paul sonrio burlon. Yo le enseñe los dientes.

-cuida a mis sobrinos- se burlo Jake. Rode los ojos.

"La próxima vez espero que te lesiones el dedo con el sofá" el me miro ofendido.

Yo comencé a correr al bosque directo a la casa Cullen. Al llegar todo estaba totalmente diferente. El patio trasero estaba lleno de troncos y ramos de decoración. Tenía muchas flores y un hermoso arco blanco y rosado.

Era bonito para ser improvisado.

Camine a paso rápido al escuchar unos gritos. Al entrar estaban todos corriendo detrás de los tres coyote los cuales habían tomado su forma animal y eran bastante escurridizos.

Yo mire al lector de mentes buscando respuestas pues era el único que sonreía divertido.

-tus niños han roto la vajilla que iban a usar el sábado en la boda- susurro como si Alice no lo escuchara.

Ella lo miró furiosa.

-tu deberías estar molesto, ES TU BODA!-gruño molesta. Yo asentí de acuerdo. El solo rodó los ojos.

-bueno, yo pedí algo sencillo solo nosotros tu fuiste la que se emociono- se defendió. Ella lo miró ofendida.

-como dices? Ninguno de mis hermanos se va a casar y tener una boda cutr- un estruendo nos interrumpió.

Sebastian se encontraba en el suelo con Jasper encima. Parece que Sebastian se resbaló y callo y con ello Jasper. Yo reí.

-pequeño podrías por favor?- suplico Emmett de manera silenciosa. Yo sonreí. Solte un gruñido llamando la atención de los pequeños.

Ellos al verme corrieron directo a mi soltando chillidos muy tiernos. Yo repartí lamidad en sus orejas en forma de cariño.

-creo que encontramos la solución a tus problemas m- dijo Sebastian a Alice la cual suspiro emocionada.

-puedes quedarte así no se unas dos horas a lo que terminó ?- suplico. Yo asentí.

"Vamos pequeños" les hable. Ellos me miraron curiosos.

"Dos papas?" Una voz femenina se escucho.

Rápidamente mire a Edward. El me miraba igual de sorprendido.

"No tonta, es papá y mama" dijo una voz masculina.

"No entiendo" dijo la voz femenina.

"Pelos de escoba por que los escucho hablar?" Pregunte preocupado.

-no están hablando, son sus pensamientos- me confirmo- imagino que es como ustedes, cuando se transforman sus pensamientos son libres- dijo un poco confuso.

"Pero apenas tienen 4 meses, es imposible que puedan articular una oración racional" dije confundido.

-quizás sea por que eres especial y su padre también lo era, quizás ellos tambien- se detuvo. Yo lo mire serio. Emmett se acerco de manera rápida.

-crees que?- susurro. Yo gruñi.

Si tiene razón, están en peligro. Mi pelaje se erizo de solo pensarlo. Los pequeños sintieron mi tensión y se acercaron a mis patas buscando protección.

"Espero que no"

Con cuidado los tome con mis dientes y los lleve a nuestra habitación. Emmett me siguió de cerca. Una vez en a habitación coloque a los pequeños en la cama y me acosté a su lado.

-estarán bien, yo los protegeré a los cuatro m- dijo Emmett dejando un beso en mi nariz. Yo suspire.

"Tengo miedo, ya no soy solo yo, ahora tengo a 5 personas bajo mi cuidado" movi mi cola ansioso.

-cinco?- pregunto confuso.

"Eres mi impronta, mi razón de vivir, claro que tengo que cuidarte m" gruñi. El sonrió enternecido.

-nos cuidaremos mutuamente- susurro. Yo sonreí. Mi mirada se dirigió a los pequeños los cuales dormían entre mis patas delanteras.

"Como los llamaremos?" Pregunte curioso.

Era una excelente pregunta. No tenían nombre, o al menos su madre jamas me los dijo, y son necesarios.

-no lo se, como quisieras ponerles?- pregunto. Yo lo medite bien. Mire a la pequeña coyote gris claro.

"Grace" dije posando mi nariz por su cuello. Ella se removió un poco y volvió a dormirse.

-es hermoso- Emmett acaricio el pelaje gris oscuro de la otra niña. - Lissa- yo movi mi cola en afirmación.

"El será Theo"

Emmett sonrió. El se recostó en la cabecera de la cama y deposito mi cabeza en su regazo. Con su mano derecha acariciaba mi pelaje y con la izquierda manentia a los niños quietos, como si los estuviera protegiendo  o escondiendo de un ser invisible.

Fue un gesto hermoso. En muestra de cariño. Lami sus dedos haciendo que sonría.

-descansen, yo los cuido- dijo con una sonrisa. Yo asentí. Cerre mis ojos dejándome llevar por el sentimiento de paz.

Me sentí completo por un momento. Ese sentimiento que si se identificar llamado Amor se instalo en mi pecho. Con Emmett es diferente, pero con ellos es tan claro, es un sentimiento de protección y amor el que crece en mi al verlos.

Con Emmett es otra cosa, sí lo amo, sí lo quiero proteger, pero va más allá. Y quizás sea por que es mi impronta ,no lo se, más no importa, por que esos sentimientos, esa opresión en mi pecho esa necesidad no se irá.

No lo permitiré, pues soy egoísta y lo que es mío, siempre lo será.

Pensando en ellos, en mi familia y manada, me deje llevar por el sueño. Rogando que mañana el día no sea tan tedioso con una Alice histérica pues solo faltan 3 días para la tan esperada boda.

Solo espero que no hayan problemas.

Al menos no tantos.