Capítulo 2

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Me había quedado dormido. Por la apena luz que había en el cielo, deduzco que debía se de madrugada. No puedo quedarme aquí.Debo dejar de ser tan cobarde y enfrentar mi realidad, por más horrible que sea.

Hace horas que dejé de escuchar los pensamientos de otros, fue algo relajante aunque preocupante. Se supone que es normal no?.

Empecé a caminar directo a la reserva. Agradezco tener un buen olfato para poder rastrear el olor a la playa. Estuve, lo que supuse fueron, horas caminando hasta llegar a la reserva.

"Oliver"

Escuche la voz de Paul. Yo me detuve . Detrás de un árbol salió un lobo gris, más claro que el mío. Venía con las orejas gachas, dando a entender que no quería pelear y estaba arrepentido.

"Paul"

Me acerque a él restregando mi cabeza con la suya.

"Estaba tan preocupado, se que estas muy confundido, así que por favor, escuchanos" yo asentí.

El me guió hasta una pequeña casa alejado de todo. Allí nos esperaba Sam y una mujer. A su lado estaba Jared, Quil, Embry y ahora Paul.

-cambia a tu forma humana- me ordenó Sam. No sé qué espera que haga si usa ese tono, pero ya me estaba molestando.

"Ya dije que no puedo"

El estaba molesto y confundido.

-bien, te explicaremos así- dijo el. - eres un cambia formas lobo, nacemos para proteger la reserva, existe un gen pasado mayormente entre hombres, pero siempre lo hereda el mayor- ahora entiendo- jamás había pasado esto, aunque de cierta manera nos alegramos de tenerte en la manada, así Paul no dejará de preocuparse- dijo algo burlon. Paul de sonrojo causando la risa en los presentes.

-callense- les dijo molesto.

-pero igual es preocupante- dijo Jared. Yo me sente en mis cuatro patas y los miré.

-debemos saber por qué no cambias, y necesitarás entrenar con nosotros y hacer guardia lo normal- dijo Embry despreocupado.

Sam lo miro mal.

Paul paso la tarde conmigo. Me contó todas las leyendas desde los fríos o vampiros, o sanguijuelas como el les dice, hasta las improntas. Me pregunto como se sentirá eso.

Tener a alguien a quien proteger, alguien que te ame y te necesite. Debe ser un sentimiento tan lindo.

Emily, la impronta de Sam, me dio un enorme plato con comida. Tenía mucha hambre, como si hace días no comiera. Ignore las burlas de Jared hacia mi forma de comer pues no sabía como, no tenía manos así que tuve que comer literalmente como un perro.

-ven te enseñare tu patrullaje- me dijo Sam. Yo lo seguí de cerca. Su lobo era totalmente negro. Era lindo, si no fuera tan mandon.

"Te escuche "  yo reí divertido.

Me enseñó hasta donde debía patrullar y el por qué. Parece que había un tratado de paz con unos vampiros. Nadie cruza al lado de nadie, a no ser que ellos maten algún humano, el tratado se acaba.

Aunque el me dice que vienen cada tantos años para no llamar la atención. Había un olor bastante agradable del otro lado, pero no podíamos cruzar. Aunque el me dijo que se habían ido hace meses, el tratado sigue en pie.

Un extraño presentimiento inundó mi pecho. Mire a Sam confundido. El miraba en una dirección. Se movia ansioso.

"Es Jacob " me dijo.

Necesidad Enfermiza●Emmett Cullen●Donde viven las historias. Descúbrelo ahora