OJOS TRISTE

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DAMON

La sangre me hierve, han pasado años y no me acostumbro a verla con otro hombre y aún peor, con mi propio hermano.

Ellos jugaron conmigo, mi hermano me quito a la mujer que amo y no pude hacer nada; nunca olvidaré como me la quito o como los encontré follando mientras yo estaba en una misión.

No puedo pensar, solo quiero liberarme un poco por ende voy en busca de alguien que pueda quitar mis ganas. Observo a la mujer que se encuentra en la barra pidiendo algo y me siento a un lado. Sabe quien soy por ende no me molesto en presentarme y justo cuando ya la tenia como quería apareció Lía a arruinarlo todo.

DAMON: acabas de arruinarme una gran cogida —tomo el trago que había dejado la mujer—

LIA: ni teniendo novia dejas esas mañas

DAMON: ve al grano querida, no tengo todo el tiempo, necesito quitarme estas ganas de enterrarle la polla a alguien —me sonríe y se acerca a mi—

LIA: sabes lo que quiero, se porque de tu enojo y ganas de sasiarte y sabes las mías

DAMON: claro —se lo quiere y no me voy a negar a darle lo que quiere— creí que Margot te había cogido en su oficina

LIA: no, al parecer le es muy fiel a su esposo

DAMON: una mierda, no te dejes engañar pero ya que lo pides. Deseo consendido, dejare que enredes tu cuerpo en la persona que antes amabas.

Se encogió de hombros y caminamos a una de la tantas habitaciones que habían o eso me gustaría pero como no soy el correcto de James lo hicimos en la oficina que no tengo idea de quien sea y para terminar no me importo si abrieran la puerta así que no le puse seguro.

Lia dejo caer su vestido y me miro a los ojos sin desviar la mirada, me fui acercando y podía ver como se le erizaba la piel con el mínimo de mi tacto. Esos ojos negros claros tan llamativos y que hacían caer a cualquiera, esas líneas que definían su cuerpo; un buen cuerpo. Pero no era Margot así que no me interesaba mucho solo quería follarmela

Se lanzó hacia mi y devoró mi boca mientras yo tocaba su cuerpo y lo recorría con mis manos, mi ereccion me pedía a gritos que la follara sin rodeos de besos y caricias ya que solo me la quería coger pero ella no se despegaba de mi boca.

La separe de mi boca para ponerla encima del escritorio y meterla sin rodeos ni caricias inesesarias pero ella se empeñaba en mi boca, así que tuve que usar la fuerza para agarras sus manos y por fin entrar en ella y escuchar como gemia mi nombre y así poder saciarme. Pero como mi día estaba tan jodido alguien abrió la puerta y yo no me iba a voltear, de echo me daba igual si hacían un círculo para ver como la follaba y gritaba de placer. Pero Lia se paro de inmediato y su nerviosismo me hizo voltear la cabeza y ver a Margot en la puerta. Mierda.

Margot: creo que debieron ponerle seguro —no había ninguna expresión en ella—

DAMON: si quieres puedes quedarte y ver como Lia grita de placer —una ronrisa decoro su cara—

Margot: te aseguro que yo se lo hice mejor que tú, y no, no quiero ver como te coges a Lia

Me saco el pene de ahí y lo vuelvo a guardar sin dejar de mirar a Margot que no me quita la mirada de encima. Lia se viste enseguida y yo solo observo a Margot.

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