Viernes
Jeno suspira terminando de anotar lo último que el profesor dicta y cierra el cuaderno con fuerza luego de que el timbre tocara.
Era la última clase y quería puro llegar a casa. Su madre en la mañana se había sentido mal y Jeno quería quedarse con ella a cuidarla, pero su madre no lo dejó. Ahora solo quiere correr a casa para cuidarla, porque se había quedado sola.
- La clase aún no termina, Lee.
- Ya sonó el timbre. - No sabe de donde sacó la fuerza y la valentía para contestar, pero salió corriendo del salón.
No pasa mucho tiempo antes de que los rumores vuelen, hablando de Jeno y su mala actitud. Generando una nueva y peor reputación.
Jeno suspira luego de escuchar a Chenle hablar sobre sus nuevos rumores.
- Tal vez debo pedirle disculpa al profesor.
- Deberías.
- Acompáñame.
- Jeno por favor. Ya estas grandecito
- Tu no entiendes mi sufrimiento y como mis manos empiezan a sudar.
El menor suspira.
Caminando por los pasillos, ambos chocan con un chico rubiecito.
- Yo... yo lo siento.
- Lo siento. - murmura Jeno deseando ser escuchado y empezando a caminar, seguido de su amigo.
- Woah, creo que me enamoré- comenta el Chino.- ¿Sabes quien es?
- Mark Lee, no te hagas ilusiones. Todos los descansos se va detrás del instituto a comerse la boca con otro chico.
- Vaya, gracias por el dato y por romper mi corazón.
- De nada, cuando quieras.
- ¿Y tu sabes quien es el otro chico?
Ayy no, Chenle chismoso se ha activado
----
2/3