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- Hijo de tu puta madre, eres un pendejo, llevamos días planeando todo para hoy ¿y de la nada te vas a ir?, ya le dije a Vegetta a donde tenia que ir Roier, preparamos la decoración con Luzu ¿ahora que hacemos?

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- Hijo de tu puta madre, eres un pendejo, llevamos días planeando todo para hoy ¿y de la nada te vas a ir?, ya le dije a Vegetta a donde tenia que ir Roier, preparamos la decoración con Luzu ¿ahora que hacemos?.

Pregunto Quackity con molestia siguiendo con la mirada a Spreen el cual acomodaba sus cosas en una mochila.

- No sé boludo, entretenelo o algo, te dije que este viaje tengo que hacerlo si o si. -Respondió Spreen terminando de guardar sus cosas.

- Sé lo que está pasando ¿pero que esperas que haga? Que le diga: "Oh Roier, sé supone que aquí tenía que estar Spreen para disculparse y decirte cuanto te ama pero se fue porque le tiraron una maldición por rebelde" -Contestó Quackity - Además no piensas ir solo ¿verdad?, ni siquiera vas a salir que te va a matar mamon.

-La verdad iba a ir con vos, pero te vas a encargar del tema con Roier.

- ¿Entonces con quien iras?.

- Solo - El oso giro para verlo y sonrio - Además tengo a mi buen ángel de la guarda que me cuida y me salva.

- ¿No dijiste que ese ángel te dejó solo en el bosque cuando le mencionaste el ir con él?

- Sí, pero sé que me está viendo siempre porque no tiene nada mejor que hacer -Levantó sus hombros sin importancia - Me estoy llevando manzanas doradas también y una muy buena armadura, aunque no puedo usar nada de diamante y eso me dificulta un poco, pero creo que voy a estar bien con esto.

- Ay Spreen, te vas a morir cabron - Negó Quackity cruzándose de brazos.

- Bueno, gracias por tus palabras de aliento capo, me hace sentir mucho mejor. -Contestó poniéndose la mochila caminando con él a la entrada.

- Entonces ¿no es broma? ¿Enserió te vas solo? - Pregunto Quackity saliendo del hogar del híbrido de oso a su lado.

-No mira, tu vieja me espera en el camino. -Contestó gracioso Spreen quintandole toda la seriedad al momento.

- Nombre, ya que cabron, ve y tropiezate cerca de un puto barranco - Respondió Quackity negando.

Spreen volvió a soltar una risa negando.

- Bueno Quackity, encárgate del tema de Roier por favor, yo ya me voy. - Hablo Spreen luego de unos segundos de silencio — Y ni se te ocurra soltar nada, si decis algo te hago mierda pato — Negó con una sonrisa orgulloso.

- Esta bien, pero esto te costara más diamantes después - Asintió Quackity - Ahora sí, vete y si te pasa algo manda un mensaje y tu ubicacion.

- Sí sí, si me estoy por morir te envío un mensaje de mi ubicación a ver si llegas antes de que me hagan mierda - Menciono spreen con sarcasmo.

- Ya enserió pendejo, si ves un barranco, te acercas y te tiras - Quackity puso los ojos en blanco y se dio vuelta para irse.

Spreen sonrió viéndo cuando se alejaba, luego dirigió su vista hacia en frente, soltó un suspiro y comenzo a caminar, tal vez no lo demostraba, pero se sentía nervioso y eso lo enojaba mucho. Él no tendría que sentir nervios por una simple aventura como acostumbraba, pero había jna diferencia, sabia que podía morir en donde hacía algo mal.

Mala suerte (spiderbear)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora