dos: A Todo Dar.

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Historia narrada en primera persona:

Llegué a casa después de haber terminado mi turno de trabajo y lidiar con mafiosos, ¡Santo cielo! ¡Hubiera podido deshacerme de ambos tipos si no fueran delincuentes y hagan que me haga pis en los pantalones!

Luego de un largo camino hacía casa el cielo se obscurecía más y ahora el colmo sería que un asesino me persiguiera en este momento, pero, mejor ni lo pienso, luego el Universo me escucha y lo toma como unas plegarias. Por lo que ahora debería preocuparme; es por mamá. Es un poco sobreprotectora sobre lo que tenga que ver conmigo aunque yo le valga menos que un cigarrillo, hoy me demore más de lo normal, espero que mamá no lo note.

Solo pude escuchar el sonar de la manilla de la puerta y un crujido de parte de esta antes de poner un pie dentro de casa me percate de mamá molesta comiéndose un pedazo de dona congelada de la nevera... De hace dos meses, de verdad que no había notado que la cantidad de comida ha estado cayendo en picada, aunque eso es jodidamente lo de menos ahora ¡Considerando que ahora tengo encima a mamá regañándome! Soy un completo imán de sermones.

Me fui a sentar al sofá delante de mamá, se nota que está charla sería larga, más de lo que quisiera.... Sé perfectamente cómo terminan estás situaciones en mi familia....

- ¿Dónde estuviste Amane Koushi? ¡Y más te vale responderme antes de que me enoje en serio! - Me exclamaba mamá Woo mirandome detenidamente con rabia pura, yo solo podía observarla en silencio con expresión despreocupada, prefiriría quedarme callada a hablar y mentir en el proceso.

- ¡CONTESTAME! VI TU GPS ASÍ QUE NO INTENTES MENTIR. ¡¿ESTABAS EN UN MALDITO BURDEL?! -

- Sí. Pero no fue a voluntad propia. - Respondí y mamá se quedó callada un par de segundos para luego envolverse en la misma bronca que tenía antes y me gritaba cosas aún más fuera de sentido para hacer enfadar a mi también.

- ¿Qué quieres decir, Amane? ¡¿Algún hombre te llevó hasta allá sin tu consentimiento?! ¿¿¡¡Anduviste de ofrecida, cierto??!! - Me arremedo mamá y yo le negué rotundamente, pero eso no evito que me agarrará de los hombros y me lavantará del sofá bruscamente, me estremecí de tal acción y solo podía concentrarme en aguantarme el sollozo, pues mamá estaba embriagada otra vez.

- ¡¡SUÉLTAME YA!! - Grité cuando "mamá" me jalo de los brazos hasta tirarme a una esquina de la sala mientras me gritaba distintas cosas y empezó a tirarme botellas vacías de licor, rompiéndose sobre o a la par de mí, provocándome ligeros cortes por diversas partes del cuerpo descubiertas que tenía.

- ¡YA TENGO BASTANTES PROBLEMAS CON LO DE LA RENTA DEL APARTAMENTO COMO PARA QUE ANDES DE FÁCILOTA, MIRA, HUELETE; HUELES A PURA COLONIA DE HOMBRE!! ERES UNA OFRECIDA DE MIERDA, AMANE, JODER. - Solo logré escuchar unas pocas cosas antes de desmayarme del susto o de los golpes en ese preciso lugar... Todo se obscureció en mi cabeza y daba vueltas.

Para luego ni idea de cuantas horas después me despertase de golpe en la cama, estaba sudada y hacía tremendo calor, logré levantarme a duras penas, cada articulación existente en mi cuerpo dolía y tenía cortes, hematomas y moretones en prácticamente casi todos los lados de mi cuerpo. En mi mesita de noche había un tazón de frutas que tenían olor a putrefacción y estaban machugadas con una nota pegada, al leerla... "Te dejé algo saludable que comer, me tenía que ir al trabajo pero habían estás frutas en la refri; Con cariño, Mamá " Ella es así, simplemente haber nacido de parte de ella es una completa pesadilla, o algo peor. "Como me encantaría empezar todo de nuevo, desde cero..." Solo se cruzo por mi mente antes de pasar de largo de las frutas e ir a la nevera a comer algo decente, llevándome para nada la sorpresa de que no había nada, el estómago me rugía de manera desenfrenada, me quede viendo las frutas de reojo... Ya me había alistado para ir a clases solo me faltaba el jodido desayuno.

Toxicomanía | TR HaremDonde viven las historias. Descúbrelo ahora