one shots traducidos de SNV x TN (Cancelada)

Hades y Beelzebub (pedido)

Advertencia: Tercera parte de la pequeña historia. Y recordar leer hasta el final <3

Créditos a la autora de está hermosa historia

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El demonio dirigió la mirada hacia la entrada de su laboratorio con el ceño levemente fruncido por la extrañeza que estaba recorriendo su cuerpo, esperando que, por alguna casualidad, la chica apareciera de golpe en la habitación con su habitual sonrisa animada y despreocupada para molestarlo.

Pero, como era de esperar, ella no apareció.

Logrando que un leve suspiro escapara de entre sus labios rojizos sin darse cuenta, volviendo la atención hacia sus experimentos para seguir anotando y comprobando cada uno de los parámetros para que ni un solo detalle quedara sin ser anotado.

Después de todo, un pequeño fallo podía llegar bastante catastrófico, incluso mortal para lo humana que ahora vivía en ese lugar.

Le costaba admitir, o más bien era algo que el orgullo no le dejaba hacer, pero en ese momento comenzaba a extrañar bastante tener a la humana moviéndose cerca de él. Revoloteando a su alrededor, haciendo preguntas de cada una de las cosas que tenía en su laboratorio en busca de establecer una conversación con él a pesar de que extrañamente recibía una contestación de su parte.

Incluso añoraba esos comentarios de doble sentido que solía dejar caer de vez en cuando junto con pequeñas caricias, abrazos y besos en su cuello y mejilla en buscando obtener algo más de él, recibiendo siempre el mismo resultado.

Que la apartara.

Pero lo cierto era que, con el simple hecho de tenerla en la misma habitación. El poder oír su voz en cualquier momento y percibir su aroma era más que suficiente para él. Calmando de una manera extraña sus pensamientos, mientras que a su misma vez llegaba a nublar su mente con esa masa oscura a la que tanto temia.

El pelinegro se sentó en la silla, leyendo algunas de las anotaciones que había hecho de ese mismo experimento, intentando comparar los resultados con otros daros obtenidos anteriormente.

-Que molesto-murmuró para si mismo, recargando

la cabeza sobre su frente con los ojos cerrados y el ceño fruncido, sintiendo un leve pinchazo en su nuca.

Habían pasado algo más de una semana desde la última vez que la había visto, y la idea de ir a su habitación en ese mismo momento parecía demasiado

tentadora, siendo algo que no le había pasado en ninguna otra ocasión.

Casi como si hubiera perdido el interés en ella, cuando en realidad necesitaba su atención con mucha más intensidad de lo que quería.

Tomando una buena bocanada de aire, lanzando los papeles sin cuidado sobre la mesa en un golpe seco, levantándose de la silla para salir cuanto antes de la habitación, más que dispuesto a ir en busca de

Atravesando el pasillo con pasos rápidos y largos, posando la mano sobre el picaporte de la puerta con brusquedad. Deteniéndose antes de abrirla, llamando con suavidad a la madera esperando el permiso de la chica para así poder entrar.

Recibiendo un largo y espeso silencio que solo logró alterarlo un poco más.

-____- la llamó, golpeando con un poco más de fuerza a la puerta, esperando que estuvieran durmiendo y no hubieras escuchado el primer golpeteo-. ¿ ____?¿Estás ahí?- preguntó nuevamente ante el silencio-. Voy a entrar- advirtió.