¿Amor o empatía? - |AnyaxDamian| - |SpyxFamily|

Capitulo 3

Capítulo 3

"El primer estudio juntos"

_ Damian Desmond_ 

Estaba en mí cuarto, estudiando Historia ya que tenía una tarea para pasado mañana hasta que suena el teléfono, por un momento pensé que podría ser mí padre pero no fue así.

– Hola Damián.
– Hola hermano. -dije algo desanimado por mí confusión.
– ¿Pasa algo?
– No es nada grave solo... Estoy agobiado por el estudio.
– Tienes que acostumbrarte, ya te lo he dicho.
– Si... ¿En fín que pasa?
– ¿Es cierto que le enseñarás a la hija de los Forger?
– Si...
– Enséñale bien ya que es hija de uno de los amigos de nuestros padres, aunque no comprendo porque nuestros padres se hicieron amigos de una niña que no es suficientemente buena en todo sentido.
– Si, yo tampoco no lo comprendo, creo que es por qué el padre de ella es parte de nuestro partido.
– Debe ser eso, igualmente lo tendrás que hacer, para quedar bien y lo más importante honrar al apellido Desmond.
– Sí, hermano.
– Esa última frase es muy repetitiva, ¿No?
– Demasiado.
– Es mejor que te la diga yo antes que nuestro padre.
– En eso tienes razón.
– Ya me tengo que ir, hasta luego.
– Adiós hermano.

Luego de esa llamada todo siguió igual: aburrido, estudio, sobrepensar, honrar el apellido Desmond, y todo ese ciclo por lo que restaba el

_ Anya Forger _

Hoy era el día en que iba a tener mi primera clase con Segundo y estaba… ¿Emocionada por las lecciones? No, ya que tendría que estudiar, pero lo bueno de estas clases es que nos podemos llevar mejor y así reinaría la paz y no habría ninguna guerra y eso era realmente importante, así que ¿Estaba emocionada por completar mi misión? ¡Si!

- Hoy verás a Damián ¿No Anya? -dijo Becky ya sentadas en el salón.
- Si Becky.
- Que mal... Anya, si te molesta, avísame y le daré su merecido, haré que se disculpe contigo, ya verás «puedo pedirles a mis sirvientes que vayan por él y lo obliguen a hacerlo».
- Que miedo me das Becky...
- Tranquila Anya no seas tímida y dime si lo hace ¿Está bien?
- ¡Está bien!

Y luego de contarme toda su novela de amor y hablar sobre la vida personal de los actores llegó el profesor de Literatura, era de las materias más odiadas por mí ya que el profesor era malo conmigo al hacerme pasar al pizarrón a corregir faltas de ortografía de las oraciones para ver si lo hacía bien o también me hacía preguntas, lo detesto.

«Esto es aburrido... ¿Debería prestarle atención a la clase? No... Damián me enseñará, no hace falta. Espero que esto se termine pronto.» -fue lo que pensé.

– ¡Señorita Forger! ¿Puede contestar la pregunta?
– ¿Ah? Si si... ¿Qué pregunta? -dije en voz baja por la vergüenza-
– "¿Cuál es la diferencia entre el mito y la leyenda?"
– Gracias…

Luego de un rato de espera no supe qué responder. Estaba demasiado pérdida, debí poner atención.

– ¿Y señorita? ¿Quiere obtener una Tornitus?
– No no, emmm es…

Y gracias a los cielos sonó el timbre y logré no responder esa pregunta que ya no me acuerdo de que era.

– Se salvó señorita, pero en la próxima no ocurrirá esto ¿Quedó claro?
– Si profesor…
– ¡Anya! Sabes que ese profesor es molesto, ¡Debes prestar atención! -dijo Becky recogiendo sus libros y su cuaderno.
– Si, lo sé, pero es horrible su clase.
– Para mí también, pero tienes que esforzarte más. Nos vemos mañana, que te vaya bien con Damián.
– Si, gracias, hasta luego Becky.

Me dirije a Segundo luego de despedirme de Becky y recoger mi cuadernos sin escribir.

– ¡Hola Segundo!
– Hola, me sorprende que no te hayas olvidaste las lecciones ya que en la clase no parecías estar tan atenta -dijo burlonamente y evitando reírse aunque ya lo estaba haciendo-
- Eso fue sólo un momento…
- Ya vamos, no quiero perder el tiempo. -dijo estando en la puerta de la clase ¿Cuando había llegado hasta allí?.
- ¡Espérame! ¿A dónde vamos?
- A la biblioteca.
- Está bien.

Luego de esa pequeña y muy pequeña conversación todo se quedó en silencio, por los pensamientos que logré leer, noté que estaba incómodo y no entendí porqué, Segundo es raro.

– ¿Estás bien, Segundo? ¿Pasa algo?
– Si... ¿Por qué lo preguntas?
– Se te ve incómodo.
– ¿Qué dices? No es verdad.
– ¿Entonces por qué estás rojo? -dije ya que parecía un tomate.
– ¡Déjame! Solo tengo calor, ¡Eso es todo! ¡Y apúrate! Allí está la puerta -dijo mientras se dirigía rápidamente a la puerta.
– Está bien, que molesto eres... Solo decía..

Al entrar unas chicas empezaron a girar el nombre de Segunda, no entendía el porqué, no era Bondman así que no había razón de aquellos gritos.

– ¡Ven aquí! -dijo Segundo tomando de mí muñeca para dirigirnos a un lugar alejado de aquellas chicas- «no puede ser... no había pensado que podría pasar esto, espero que no nos molesten» Aquí está bien, siéntate.
– Tienes muchos problemas
– No sabes cuantos... ¿Con que quieres empezar?
– Mmm... No lo sé, necesito ayuda con todas.
– ¿¡Qué!? ¿Estas bromeando no?
– Sería una buena broma pero no.
– «Me tomara trabajo está enana» Haremos todas turnando todos los días que tenemos.
– Bueno.
– Trata de prestar atención ¿Sí? Te lo digo porque sé que te distraes en todo.
– Si entiendo, verás que llegaré a tener Stellas fácilmente.
– Mejor que yo nunca.
– Si claro...
– Empezaremos por Literatura.
–  Chi
– Debemos mejorar tu hablar también.
– Si si... ya me lo dijeron..

Luego de unas horas de estar con actividades que no entendía nada y cada vez que hacía algo mal me gritaba, hasta la señorita de la biblioteca se asustó por ello. En un momento Segundo dijo que guardara todas mis cosas ya que ya eran las 17:00.

– ¡Todavía no son las 17:00! ¡Son las 16:30! -le reclamé.
– No pienso llegar tarde a estudiar, entre guardemos las cosas y lleguemos a la salida tardará mucho -dijo terminando de guardar sus libretas-.
– Está bien «Que perfeccionista»
– ¡Ya apúrate!
– Que molesto eres, nunca tienes í paciencia, no eres perfecto, no entiendo cómo las chicas de allí no te paraban de aludir.. 

Me había molestado tanto que no hable en todo el camino a la salida hasta que Segundo se dirigió.

– No aprendes rápido, debes concentrarte más.
– Como siempre eres malo conmigo no es algo que me gustaría hacer, pero si fueras bueno si lo haría… pero por lo menos te preocupas de que aprenda así que supongo que te preocupo.
– No confundas enana, solo lo hago para ver si por lo menos me dan Stellas por ser un buen maestro.
– No entiendo porqué te preocupas, tienes bastantes Stellas, te faltan 6.
– 5 Stellas y si me preocupo es porque debo ser el mejor ¿No lo crees?
– No es obligatorio, nadie es perfecto ¿No?
– No lo entiendes, una plebeya como tu no lo entendería. Ya llegamos.
– No hacía falta que me acompañarás.
– Como un Desmond es mí obligación, tengo que ser un caballero, es por la imagen de mí familia.
– Un Desmond, un Desmond… ¿No es muy cansado escuchar eso siempre? Además tendrías que dejar de estudiar un poco y divertirte. 
– No tengo tiempo y lo que tengo es oro para mí.
– Y ese tiempo lo usas para mí, me siento halagada ¡Nos vemos!
– No seas tonta..