Capítulo 11

262 20 3
                                    


Capítulo 11

"Un nuevo viaje"

_ Perspectiva de Anya Forger _

Hoy fue el acto de cierre y fue sorprendente (excepto la parte del largo y aburrido discurso que dijo el "señor elegante"), nos dieron nuestro certificado de haber terminado el sexto año de estudio en la Academia Edén, Segundo quedó en el primer puesto de mejores calificaciones (por sexta vez), Ian en el segundo puesto, Becky en el cuarto y yo en el quinto, seguro la sorpresa que tienen mi papi y mí mami va a ser grande, me esforcé mucho por subir mis calificaciones, igual si la sorpresa es mucho maní estaré feliz. Hoy a la noche habrá una cena para todos los integrantes del curso y sus familias, tantas fiestas se está volviendo cansado pero Becky va ir y eso me alegra demasiado.

_ Perspectiva de Damian Desmond _

Al llegar al salón donde habían reservado era enorme. Está seguro que nuestro padre no iba a venir por sus temas imprescindibles, ya me estaba acostumbrando, no, ya me había acostumbrado, siempre era lo mismo. En un momento de la cena el señor Forger llamó la atención al golpear su copa sutilmente con un tenedor.

– Señores y señoras, alumnado de la academia Edén, es un agrado informarles a todo el curso, que por parte de la familias de cada alumno, organizamos un viaje para todos los estudiantes por una semana para que vayan de campamento.

En ese momento todos mis compañeros empezaron a celebrar, está era la primera vez que iba de campamento ya que la mayoría de vacaciones mis padres me obligaban a estudiar los apuntes de mí hermano del año que me tocaba para que entienda lo que iba a estudiar. Era nuevo y extraño, sin embargo estaba feliz por ello.

El día del viaje tuvimos que ir a un punto de encuentro donde un autobús de dos pisos nos estaba esperando.
Este era demasiado grande y por dentro tenía mesas redondas donde a su alrededor había cuatro asientos enfrentados y cada asiento estaba asignado, cómo nuestras familias eran amigas ya me esperaba el resultado: Blackbell, Bennet y si, Forger. Al subirnos nuestros padres se despidieron y hasta algunos lloraron un poco, mí madre estaba emocionada y preocupada.

– Anya ¿El señor Loid no te dijo cuánto iba a durar el viaje? -preguntó Becky.
– No.
– Se que va a durar cuatro horas.
– Muchas gracias Ian.
– ¿Cuatro horas? ¡Qué aburrido! -dijo Anya en forma de capricho de una niña de diez años-
– ¿Qué tal si jugamos un juego? -dijo Ian.
– ¡Si! -dijeron Anya y Becky al unísono-
– ¿Tu Segundo?
– Está bien.
– Bueno, el juego es el siguiente: vamos a dar un tema en específico y vamos a tratar de adivinar lo que el otro piensa y los dos que ganen eligen con quién sentarse, así cambiamos un poco. «Más bien para mí conveniencia».
– Me parece bien. -dije.
– ¡Bueno! Becky elige un tema. -dijo Anya mirándola.
– Mmm… Un ingrediente que se usa para cocinar un pastel.
– ¡Ya lo tengo!
– Yo también -dije, había escogido manteca-
– Está bien. Yo pienso que Anya eligió… Harina -dijo Ian.
– Yo creo que Ian eligió… esencia de vainilla. -dijo Anya.
– Yo creo que Blackbell eligió harina. -dije.
– Y yo creo que Desmond eligió huevos.

Anotamos lo que habíamos elegido cada uno realmente y ganó Anya y Becky.

– ¡Vamos Anya! Empezamos muy bien amiga.
– Si Becky, ¡seguro ganamos!

Pero no fue así del todo, Becky terminó siendo la peor en todo el juego y Ian y yo estábamos empatando en cada partida y Anya siempre quedaba en el primer lugar, esa enana parece que puede leer la mente, pero no es posible. Luego de unas partidas tuvimos que detenernos ya que nos trajeron algo para comer. Por ello, supe que Anya además de gustarle demasiado el maní (y decir demasiado es poco) le gustaba muchos los chocolates y eso fue lo único relevante en la "conversación" que tuvimos los cuatro, ah y además de eso, es oficial, me caía pésimo Ian, la forma distinta en que trataba a Anya no me agradaba para nada. Ni que esa fea fuera tan especial.

_ Perspectiva de Anya Forger _

Al llegar, las carpas todavía no habían sido armadas y las tuvimos que armar nosotros con ayuda de una señorita que se encargaba de nosotros, yo iba a dormir con Becky y está sería mí primera pijamada así que estaba demasiado feliz, todo estaba saliendo muy bien.
Luego de haber terminado de hacer las carpas nos hicieron un recorrido por todo el lugar, jugamos a las escondidas en el bosque que había, y en la primera partida perdí, así que tenía que buscar ahora a los demás.

– …dieciocho, diecinueve y veinte -dije apartándome del árbol en el que me había apoyado- ¡Ya empiezo!

Al ser pequeña no tenía una buena panorámica de todo el lugar, lo cual me complicó bastante. Hasta que vi a alguien detrás de un arbusto.

– ¡Te encontré! -dije asomándome al arbusto.
– ¡Ay Anya! Pensé que aquí no me encontrarías -dijo Ian con parándose.
– No te escondiste tan bien. -dije volviendo a mí sitio.
– Tienes razón… Anya quiero darte algo.
– Claro.
– Toma -dijo dándome unas margaritas- una flor para otra flor.
– Que bonitas, muchas gracias.
– Me alegro que te haya gustado -dijo poniéndose un poco colorado, me hizo acordar a papi dándole las primeras rosas a mami.
– ¡Pica para todos! -dijo alguien detrás de mí.
– Perdón, no era mí intención hacerte perder. -dijo Ian.
– No hay problema, no soy buena buscando y si te encontré fue de suerte.
– No, eres muy buena encontrándonos «aunque me tuve que asomar un poco para que me viera».

Al acercarme, el que había salvado a todos fue Segundo, se había escondido muy bien. Al terminar de jugar nos llamaron para comer e irnos a dormir.

_ Perspectiva de Damián Desmond _


Al irme a la carpa para ir a dormir me dí cuenta que Ian me había estado siguiendo.

– No hacía falta que hagas eso.
– ¿Qué cosa?
– Interrumpir la conversación que tuve con Anya, solo le quería dar unas margaritas ¿Te molesto?
– No, para nada y no fue mí intención interrumpir lo que estaban haciendo, pero si quieres un consejo, a Anya le gustan los chocolates y el maní, por si no sabías y más que las flores.
– Lo sé, pero no traje ninguna de esas cosas.
– No puedes dar una batalla sin armas -murmure.
– ¿Perdón?
– Nada, solo ya quiero dormir ¿Puedo?
– Si, ya me iba. -dijo saliendo de la carpa.

Había confirmado la guerra ¿No? Ni yo mismo me lo imaginé, pero Ian me caía muy mal así que tampoco lo podía ver saliéndose con la suya, es por eso que acepte, detesto a Ian y la plebeya piensa que es bueno y no es así. Solo es eso.

¿Amor o empatía? - |AnyaxDamian| - |SpyxFamily|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora