Terminando como el Fénix

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Fue una cuestión de segundos para que ellos estuvieran justo como les dije, desangrándose, yo solo sonreí y me agaché frente a ellos.

—Tranquilos, no dañe nada de importancia no sean exagerados—dije y me despedí de ambos con una sonrisa y tome uno de los coches yéndome pisándole a fondo del dichoso aparcamiento, y salí a la superficie grande fue mi sorpresa al ver como había tantos agentes apuntándome.

—¡Adele!—grito uno de mis progenitores—Sal del vehículo, hagamos esto por las buenas y prometo que no volveré a dejar que te encierren.

Active los megáfonos del coche y me decidí por responderle, por que no sería divertido para el toque final.

—En verdad debo admitir que estoy halagada, en verdad si que os habéis esmerado—dije con gracia todos seguían en la misma posición ninguno había dejado de apuntarme en ningún momento.

—Hija, por favor, solo danos la oportunidad de enmendar nuestros errores del pasado—dijo la voz de la mujer que me dio a luz con un aspecto deplorable.

—Creo que no será posible por qué su hija murió el mismo día en que la abandonasteis,...¿demasiado tarde no creés?—dije con rencor ácido en mis palabras y salí de ahí dándole gas a esta preciosidad.

Y todos se apartaron, por que yo no iba a frenar por nadie.

No tardaron mucho en seguirme, sorpresa para ellos que un vehículo solo era una parte externa de mí, somos uno y no le tengo miedo a la de velocidad.

Logré darles esquinazo hasta que llegue a un pueblito donde aparqué el coche, iba a dejarlo ahí por qué seguramente ya estarían rastreándolo pero me vi detenida al escuchar unos golpes venir del maletero, con una mano en la espalda baja donde descansaba mi pistola y la otra en la puerta del maletero lo abrí llevándome una sorpresa enorme y me enfurecí en cuestión de segundos.

—¡Se puede saber que haces aquí!—dije furiosa mientras tomaba por las axilas a mi hermana y la dejaba en la acera ella no despegó su mirada triste del suelo—¡Brisa Leone, en que diablos estabas pensando al hacerlo!¡Acaso pensaste en las consecuencias!

—Yo solo quería estar contigo—dijo con ojos tristes y cristalizados—No quiero que me dejes otra vez, yo solo, solo quería estar junto a ti—dijo y terminó explotando en lágrimas y mocos.

—Bueno, bueno, vale, si, no llores más, siento lo de gritarte—dije abrazándola y tomándola en brazos—Deja de llorar la gente nos mira—dije y ella lloro más, maldición.

—Es que no puedo parar—dijo entre lágrimas, genial.

—Andando, rápido tenemos cosas que hacer y no tenemos tiempo que perder—entramos en un supermercado y cogi un agua grande para el viaje, una cuerda y caramelos de menta.

Llegue a la caja y puse todo en la cinta corredora y grande fue mi sorpresa al ver como mi hermana iba cargada hasta arriba de golosinas diferentes. Respiré profundamente y le mire con reproche pero ella me miro con esa carita tan dulce y adorable que terminé cediendo ante sus caprichos.

En el coche deje una nota para cuando lo encontraran, me moría de ganas de ver su reacción, tome de la mano a mi hermana la que no había dejado de comer golosinas y en la otra tenia la bolsa con toda la compra que había realizado.

Tenia que buscar un vehículo, y encontré uno perfecto perfecto era discreto y pequeño no quería llamar mas la atención después del escándalo de mi hermana, fui sacada de mis pensamientos al notar un tirón en mi chaqueta.

—Adele—dijo me hermana mirándome a los ojos, a lo que yo levanté una ceja acusatoriamente.

—Si.

—Necesito ir al baño urgentemente—dijo mientras se aguantaba de la tripa con dolor.

Pase mi mano por mi rostro y me pellizque el puente de ma nariz intentando disipar mi mal genio.

—No vas a comer más golosinas pequeña glotona—dije y nos encaminamos a un bar cercano a nuestro paradero.

Una vez entramos, solo había algunos  borrachos  tomando cervezas y otros en la barra, en cuanto entramos las miradas no se hicieron de esperar,  tome a mi hermana en brazos e hice que escondiera su cabeza en mi cuello, me acerque a la barra donde estaba la camarera.

—Hola buenas, ¿el baño por favor?—dije con una sonrisa amable, ella solo me miro de abajo arriba.

—Para usar el baño hay que consumir—dijo y yo solo sonreí con amargura y pedi una cerveza que ella me puso de mala gana.

Alguien se esta rifando una ostia como una casa.

Baje a mi hermana y tome la llave, la acompañe al baño y ella entró, yo me dirigí a la barra y me empecé a tomar ma cerveza tranquilamente hasta que sentí como una mano rozaba mi cadera y me gire inmediatamente viendo a un tipo viejo y alto sonreír.

—Hola belleza—dijo y yo le gire la cara sin responder—Vamos guapa, no quieres algo de compañía, mis amigos y yo podemos pasárnoslo juntos muy bien—dijo y yo estaba intentando controlar mis impulsos—Acaso no tiene lengua la gatita.

Gatita tu madre cabrón.

—Mira viejo,  sino te contesto es por que me estas dando mucho asco, por favor señor deje de molestarme o me veré obligada a llamar al geriátrico del que se ha escapado —dije y él me miro rojo de ma furia.

—Como te atreves maldita perra—dijo y yo solo le ignore—Te voy a enseñar a respetar—dijo y justo cuando iba a cogerme del brazo me aparte provocando que se cayera y se diera contra la barra en la nariz.

—Que pasa viejo, ya empezamos a tener inicios de demencia senil que no viste la barra—yo no podía evitar reírme de la situación

—Te vas a enterar chicos agarrarla—dijo y un grupo de hombres se encaminaron hacia a mi.

Esto se pone cada vez mas interesante.

N/a
Holaaaa.

Ya se que llevo mucho tiempo sim escribir pero tengo este ultimo curso bastante complicado el tema de estudios y trabajar me está superando y por ello no puedo dedicarle mucho tiempo a escribir os dejo este capítulo con mucho amor siento muuucho la demora, pero intentaré subir capítulo de fallen angel en cuanto tenga algo de tiempo disponible.

Besitos 💋