Capitulo 12

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Después de un breve intercambio de miradas, Shen Luyang soltó suavemente la mano de Peng Jun, mostrando una actitud sumamente considerada, esperando pacientemente que tomaran una decisión.

Los cuatro se vieron sorprendidos por el repentino cambio de Shen Luyang y sus ojos se encontraron en un frenesí de comunicación, especialmente los de Li Shenyu, quien parecía estar más inmerso en la situación.

Al ver que tardaban en decidir, Shen Luyang, con una gran comprensión, les ofreció otra opción: —Si, dada mi edad, no se sienten cómodos golpeándome, entonces podemos seguir adelante y enfocarnos en sus estudios. Podemos dejar lo sucedido hoy atrás y mantener una relación amistosa en clase, y fuera de ella, para vivir en armonía.

Li Shenyu intervino de inmediato, fijando su mirada intensamente en Shen Luyang. —Estamos de acuerdo— afirmó —¿Cómo vamos a proceder entonces?.

Manteniendo su actitud humilde, Shen Luyang extendió su mano en un gesto de concesión. —La elección es suya.

Los ojos de Li Shenyu se volvieron serenos. —Te golpearemos en el rostro, mientras que tú... nos golpearás en la espalda.

La estrategia era simple: si se enfrentaban cara a cara, ellos tendrían la ventaja numérica y seguramente uno de ellos podría lograr golpear en el rostro.

Shen Luyang asintió en acuerdo, sin aparentar preocupación alguna, y apretó ligeramente su muñeca derecha, manteniendo una sonrisa amigable en su rostro.

—¿Comenzamos ahora?— preguntó Li Shenyu, con calma en su mirada.

Shen Luyang parpadeó y no pudo evitar soltar una risa discreta. Dio un paso adelante sin dejar rastro y respondió: —Aquí y ahora, les daré una lección para asegurarnos de que estén realmente comprometidos.

Antes de que pudiera terminar de hablar, de repente extendió su mano y agarró el hombro de Xiang Lei, tomando por sorpresa al joven antes de que pudiera reaccionar, y aplicó una presión precisa.

Xiang Lei, completamente desprevenido, tuvo su brazo desplazado de su hombro, un joven de gran estatura de 1.80 metros. Sus lágrimas brotaron como un hervidor hirviendo y un grito desgarrador escapó de su boca.

Shen Luyang dio una palmada en la espalda de Peng Jun y luego apretó su hombro con un crujido antes de soltarlo. Continuó con su discurso, diciendo: —En ese momento, no se pongan torpes y le den al otro tiempo para prepararse, de lo contrario...

Un puñetazo vino desde la izquierda, pero Shen Luyang ni siquiera volteó la cabeza. Agarró la solapa de la ropa de Xiang Lei, quien aún gritaba, y empujó su palma hacia la izquierda.

Peng Jun se sorprendió y detuvo su ataque, pero el impulso no le permitió retroceder. Los dos hermanos parecían haberse reunido después de una separación de diez años, extendiendo sus brazos y abrazándose efusivamente.

Shen Luyang se emocionó y, con consideración, le dio una palmada en la espalda a Peng Jun.

Ambos quedaron fuera de la pelea.

Ding Yifan y Li Shenyu rodearon a Shen Luyang, uno por delante y otro por detrás. Shen Luyang retrocedió medio paso hasta que su espalda quedó apoyada en la pared.

Al ver lo que les había sucedido a Peng Jun y Xiang Lei, ambos se sintieron presionados y buscaban desesperadamente una oportunidad.

Shen Luyang levantó la muñeca y miró la hora, recordando la bebida de soja en su mochila. Urgió: —¡Rápido, rápido! La bebida de soja del profesor se enfriará.

Era una provocación descarada.

Ding Yifan fue el primero en perder la paciencia y corrió desde atrás, mostrando un gesto amenazante al levantar el puño.

Rescatando al protagonista del lunático, me convertí en su objetivoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora