Aerial Chronicles: ¡Soy el maldito villano!

Los héroes nacen de las... adversidades?

En una habitación moderadamente lujosa, un joven de cabello castaño estaba sentado tranquilamente en la cama después de haber terminado su "actividad".

Mientras observaba a la sirvienta dormida con la que acababa de acostarse, el joven entró en el famoso "modo sabio".

Aunque la sirvienta no era la más bella, su cuerpo sin duda era el mejor entre todas las sirvientas que trabajaban para su padre.

(¡Ja, ja, ja! Me encanta esta maldita vida).

Este joven era nada más y nada menos que Adam Sherden, el protagonista masculino de Aerial Chronicles.

Con el paso del tiempo, su modo sabio se profundizaba, hasta que cierto recuerdo vergonzoso vino a su mente.

(Maldición, estuve a un paso, a solo un paso, y ella sería completamente mía).

Adam se lamentó profundamente por su fracaso en aquella fiesta de la princesa, donde se suponía que debía conquistar a Valeria Steele y, como bonus especial, su prometido también debería estar por allí.

(¿Por qué? ¿Por qué vinieron esos bastardos a interrumpir mi momento?)

Se refería al prometido de Valeria y a sus acompañantes, incluida la princesa, a la cual tenía en la mira desde el momento en que la vio.

(Tengo una ventana de estado e incluso un inventario, eso significa que soy el héroe de este mundo, ¿no?)

Adam no sabía en qué mundo estaba, pero recordó algunas historias de sus amigos y, sobre todo, de sus amantes.

(La chica con lentes y gran trasero decía eso, ¿cómo era? ¿Marine, Sofía?, no lo recuerdo).

En la Tierra, entre las muchas amantes que tuvo, una en particular era fanática de las novelas ligeras, y cada vez que tenía la oportunidad mencionaba cosas como isekais, transmigración y reencarnación.

Para alguien como Adam, cuyas fantasías se cumplían en la realidad gracias a su vida bendita, no le agradaban mucho ese tipo de pasatiempos, pero por el cuerpo de esa chica, valía la pena sacrificar un poco.

(¿Quién hubiera pensado que vendría a un mundo similar...?)

Desde que se enteró de su estado en este mundo, Adam ha estado buscando esos llamados clichés a los que sus amigos y la chica con lentes se referían.

(La sexy madre o madrastra, la amiga de la infancia y la hermana incestuosa...)

Recordando lo que ocurrió después de la fiesta, su enojo se incrementó.

(No solo no me gradué con ella, Valeria, incluso perdí a mi sexy hermana).

Una joven atractiva de cabello rosado y ojos azules, que tenía en la mira y que identificó como la hermana incestuosa de una novela.

(Ahora que lo pienso... ¿No es este el típico cliché?)

Un cliché donde el villano secuestra a la heroína principal y luego el protagonista tiene que atravesar dificultades mientras conoce a bellezas que lo ayudarán y se convertirán en su harén, para finalmente conseguir a la más bella de todas en una batalla final con el villano.

(Ja, Ja, Ja, debe ser eso. ¿Quién lo diría? Incluso tengo una trama como la del fontanero con bigote. Ja, Ja, Ja).

En cuanto a cómo sería su destino a manos del villano, Adam no se preocupó, puesto que sabía que todos los villanos eran retrasados.

(Esos bastardos solo saben hablar y hablar).

La chica de lentes siempre decía que los villanos de las novelas eran eunucos, ya que, teniendo a tremenda belleza, ellos solo esperaban a que apareciera el héroe y los golpeara hasta la mierda.