CAPITULO 09: EL CONTRATO

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El objetivo del contrato es vincular el Sumiso y la bella Ama Domina a los siguientes elementos:

Él Sumiso reconoce que la Dueña es su Ama. El pertenece a la Dueña y es la propiedad de ella. En esta capacidad, él consagra el respeto y obediencia a ella, y le cede el poder sobre él a ella.

La Ama reconoce el sumiso como el sumiso de ella y con el compromiso de ser entrenado como un esclavo obediente; ser dirigido por ella, ser educado por ella , ser correjido por ella, hacerle sentir la sumisión de ella, ponerlo en su lugar, castigarlo según como ella crea necesario o de su buena voluntad.

Condiciones del contrato

1. Confidencialidad

La naturaleza de la relación presente no será divulgada entre los terceros sin el consentimiento expreso se las dos partes o en situaciones que explícitamente lo inducirá (por ejemplo, una fiesta temática). Lo mismo cada uno se compromete en respetar las obligaciones familiares y profesionales del otro.

2. Comunicación

Él sumiso y la Dueña se comprometen en comunicar por lo menos una vez por día por correo electrónico en la mañana; con la excepción de casos particulares acordados de antemano o casos absolutamente necesarios: viajes y acontecimientos familiares, etc.

La Ama podrá decidir comunicaciones mas frecuentes o en momentos particulares, y podrá exigir él sumiso que la llame por teléfono a cualquier momento que ella decidirá. Él sumiso muestra sus tributos cada día y renueve sus deseos. Ella entonces, le da instrucciones.

Él sumiso le trata de usted a la Dueña, y la llama Ama. Él puede eventualmente llamar la por su segundo nombre, a menos que ella decide lo contrario. La Ama, por su parte, llama él sumiso como ella desea. Esta disposición no se aplica en público (posición social), o el tuteo y la denominación por los nombres serán admisibles de ambas partes.

3. Obediencia

Él sumiso obedece la Dueña a todos los puntos generales. Él obedece todas las ordenes y las instrucciones de la Ama. La Dueña podrá igualmente hacerlo obedecer en cualquier momento con el chasquido de sus dedos. Al hacer chasquido con sus dedos, él sumiso para de hablar y detener cualquier tarea-actividad en curso. Él mira a la Ama -indicando con el dedo lo que ella quiere- y él obedece inmediatamente.

Por defecto, si ninguna señal de la Dueña se realiza, él sumiso se arrodilla delante de ella y besa su mano (si la situación lo permite = situacíon privada).

4. Devoción Del Sumiso a la Dueña

Él sumiso satisface la Ama Domina en cualquier momento que ella quiere. La satisfacción sexual de la Dueña es la prioridad. Él sumiso obedece en tiempo real a sus órdenes e instrucciones del asunto. Además, él sumiso toma la iniciativa para colmar Ama Domina sexualmente: Él propone satisfacer la espontáneamente en varias maneras. La Ama decide y dispone su tiempo de acuerdo de su buena voluntad.

Él sumiso pone su cuerpo disponible constantemente para su utilización pasiva. Si él sumiso no satisface la Dueña correctamente, él será castigado automáticamente. En privado, él sumiso está desnudo delante de la Ama Domina y él le sirve a ella como ella lo exige. Sumiso llevará su collar como signo de pertenencia. Él también usará los trajes y accesorios requeridos por ella. Cuando él viene a reunirse con la Ama, él llevará los trajes y accesorios que ella deseará. Cuando él la encuentra, él se arrodilla delante de ella, besa la mano, y se desnuda en un signo de pertenencia y sumisión.

Ama tiene una jaula de castidad cuyo ella impondrá él lleve puesto cuando ella crea oportuno cumplido con las obligaciones sociales y profesionales. Si es necesario, la Dueña podrá utilizar una cerradura de combinación, para poder liberar el sexo del sumiso a distancia cuando ella desea.

The Kingdom of DominationDonde viven las historias. Descúbrelo ahora