capitulo 23

1.3K 188 35
                                    

Wilberth no se atrevía a decir una palabra, la expresión negra en el rostro de Maximiliano. Indica cuan enojado se encuentra y que quería matar a una persona, podía asegurar que el era el principal en la lista de su hijo.

-¿Cuando piensan largarse?-¡¿Que están esperando?!-Dejo caer un florero bajo los pies de su padre y padrastro.

Luego de que Hayden saliera del departamento, Maximiliano lo persiguió pero no logró alcanzarlo. Hayden ya había subido a la camioneta de Nikita.

-Max, ¿En verdad te gusta?

¿Su relación no es una mentira? Esa expresión desesperada tenía tiempo de no verla en su rostro. No es algo que pueda fingir.

-¿En serio te gusta ese niño?

"¡¿Qué?! ¿Gustarme? ¿Me gusta Hayden?" Maximiliano se estremeció, no se había puesto a pensar en eso. Pero en el momento que se pregunto eso, su corazón dio un pequeño vuelco. Ese rugiente sonido le había confirmado lo evidente pero se niega aceptarlo.

-¿Acaso estaría con una persona que no me agrade?-Me niego aceptar estos extraños sentimientos.

Solo estoy confundido porque es Hayden es la primera persona que me hace sentir esas raras sensaciones y no me desagrada sus toques....pero estoy seguro que no podría hacer nada de eso con otra persona, de solo imaginarme eso es repugnante. Me produce ganas de vomitar.

-Ni cantes victoria, padre-Los ve fijamente-Está pequeña discusión no va arruinar nuestra relación-Sus ojos celeste se torna sumamente oscuros y posesivos-Hayden es solamente mío.

Gustavo se tesón, lo entendió al instante. Que su sobrino no tiene ni la más mínima oportunidad de poder estár en la mirada o corazón de Maximiliano. Que esté ya había elegido a la persona que quiere en su vida y cama.

-¡Te volvistes loco!-Se exaltó-¿Es un beta? ¿Verdad? ¡No podrá darte un hijo!

¿Que le hizo ese niño? ¿Con que cosa lo hechizo? Mi hijo es una persona irreconocible, ¿Dónde quedó el joven que solo quería llevarme la contraría? Lo que está diciendo no es una mentira ni está fingiendo. Lo dice en verdad, esa mirada tiene convicción.

-¡No me importa si no tenemos hijos!-Golpea la mesita de decoración de la sala-¡Si tengo que tenerlos yo, los tendré!

Se los dejó en claro, sorprendiendo a cada una de las personas que se encuentra en la sala. Constantine casi se va de espalda.

-¡M-Mi hijo enloqueció!

Está vez en serio, el viejo Withe iba a tener más que un infarto. Las declaraciones de Maximiliano lo habían dejado sin habla. Wilberth estaba culpando a Hayden, quién se encuentra ocupado sacado su estrés y enojo.

Los ecos de una escalofriante sonrisa, estremecen los cuerpos semi inconscientes tirados en esa piscina de sangre y cadáveres. Esas personas habían hecho enojar e amenazar a la persona equivocada.

Era inevitable el no quedar con expresión aterrorizada antes de partir de este mundo. Ese rostro y persona enloquecida era lo último que querría ver tus ojos antes de morir.

-¿Que dices?-Pregunta con una mirada espeluznante cubierta de sangre y esa sonrisa de blancos dientes.-No te escuché.

Este día paso de ser sorprende a convertirse un día de mierda. A las personas les encanta desobedece las advertencias y siguen cometiendo los mismos errores. Como se atreven a intentar violar a una adolescente, en mi territorio. A esos gánster que están empezando su comunidad, tengo que hacerles saber quien manda.

-Dije lo lament....¡Aaah!-Mi piel, mi piel está siendo arrancada a pura fuerza bruta.

Yo cometí el peor error de mi vida, nunca debí de aceptar esa maldita petición. Si pudiera volver atrás, no tomaría esa llamada. ¿Como se supone que puedes investigar al diablo en primer lugar? Esa familia no saben a quien están intentando acabar.

Rosa sangrientaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora