Más que hermanos (ThorXLoki) Yaoi

No Quiero Verte Llorar

Me encuentro en un sitio oscuro, completamente cubierto por tinieblas parece que es frío pero no logro sentirlo, no siento frío ni calor a mi alrededor no hay caminos a seguir todo parece estar en el vacío parece que yo soy el único ahí, no puedo hacer más que tumbarme sobre mis rodillas aferrado a mis propios brazos con mis manos y temblar. Esto es un sueño así que ya sé qué pasará... ahora una voz fuerte y recia me gritara de las sombras para llevarme con ella.

El pequeño Loki se encoge de hombros cubriéndose más entre sus ropas esperando a oír esa voz que le llevaba al mundo de las pesadillas, pero algo era diferente de este sueño, una luz dorada comenzaba a brillar cada vez más y más, Loki alza su mirada y su rostro cubierto con lágrimas se ilumina, sabe quién es, sabe que es su héroe que viene a salvarlo, rápidamente se levanta, sus piernas dejan de pesar, su cuerpo puede moverse con libertad otra vez ya no siente miedo, el miedo ha sido espantado. "La pesadilla va a terminar" piensa él con alegría cuando observa la figura de su hermano, la cabellera de Thor relucía era más larga que de costumbre, tenía puesto su típico traje azul junto a su capa roja, este mostraba una sonrisa amable y dulce, extendió sus brazos sin decir una palabra a Loki y cerro sus ojos. Loki corrió hacia él con todas sus fuerzas dispuesto a abrazarle dispuesto a no soltarle nunca, pero cuando Loki le rodeó con sus brazos este se esfumó desapareciendo por completo, dejando una especie de visión frente a Loki, en ella aparecían él y Thor, ambos corrían por los jardines jugueteando hasta que de repente en la visión Loki estuvo tendido en el suelo, había sido apuñalado por Thor, vio la escena como si de una película se tratase vio el rostro de su hermano lleno de desesperación, pero sin ninguna lágrima el Thor de la visión voltea a ver al Loki actual y alzando la daga en su mano rebana su propia garganta frente a este.

Loki perdió la noción de la realidad por completo, sus ojos no podían centrarse en la imagen que ahora contemplaban, sus lágrimas resbalaban por su rostro y de un fuerte y potente grito, dijo con todas sus fuerzas.

-¡NO! ¡THOR! ¡NO POR FAVOR!

Se levantó de golpe de aquella pesadilla sudando frío y con la respiración completamente acelerada, se sacó la camisa rápidamente, sentía que algo le ardía, le quemaba violentamente, cuando observo su abdomen vio la cicatriz que Thor le había hecho con aquella daga, salto de la cama y corrió hacia el corredor, abrió la puerta con fuerza y choco contra alguien que se encontraba parado justo fuera de su puerta. Era Thor (17 años) quien antes de que este cayera le tomo con fuerza de sus hombros y le observo algo preocupado, inmediatamente lo soltó y dejo que se incorporara retrocediendo un poco.

-Thor... -Dice Loki mientras le observa conteniendo las lagrimas.

Estas vivo... solo fue otra pesadilla, gracias al cielo... -piensa para sí mientras sonríe por lo bajo.

-Escuche que gritabas, todavía sigues soñando con aquel día por mi culpa... -Dice con una mirada vacía en sus ojos observando la cicatriz que tenía Loki justo bajo su ombligo- Buenas noches hermano.

Tras decir esto Thor se apura por retirarse dando media vuelta y caminar a paso veloz a su habitación sin mirar atrás.

-¡Thor! ¡Espera! -Dice Loki quién camino un poco tras él pero al ver su espalda tan ancha y distante se arrepintió y se limito a decir- Buenas noches... hermano.

A la mañana siguiente vio que el palacio había quedado solo por completo, según le habían informado hace dos días, Odín y Thor irían de cacería por unas semanas junto a los amigos de Thor, excepto por Sif y Fandral quienes estaban entrenando en privado en otros lugares de Asgard, la madre de Loki había salido de Asgard por alertas de guerra en uno de los planetas cercanos a la tierra, ella era una mediadora entre el universo y la tierra pero la tierra no tenía conocimiento de esto. Sin más Loki hizo lo que siempre hacía cuando estaba solo, tomo un libro y camino al salón principal, se sentó en un gran sillón rojo y comenzó a leer, ahí se quedo por horas y horas hasta que llegó la noche, sin percatarse mucho dejo el libro de lado y estiro su cuerpo para desentumecerlo, camino a la cocina y lanzo un pequeño suspiro, cuando escucho un tremendo ruido de hoyas tirándose y vasos rompiéndose.