Total Interferencia | Charly García

A Punto De Caer

Alma se levantó con una sonrisa y con unos nervios que se posaban en su pecho. Era típico de un día entero de esperar a que llegue aquel momento especial. Hoy, Alma tocaría en el Luna Park, Alma y Fito, todos tocarían en aquel escenario, con más de ocho mil personas observando. Sabía que todas esas personas no estaban allí por ella, pero no le importaba, estaba feliz con saber que era parte de algo tan valioso para el público. Pensaba en como se le aguaron los ojos cuando Baglietto les dio las noticias de tocar en Obras, y en como en unas horas estaría tocando frente al doble de personas. Cerró sus ojos y olio el fuerte aroma de su café. Mientras ella y Fito disfrutaban una facturas, el teléfono empezó a sonar. Caminó hacia él rápidamente.

"¿Hola?" Era la primera vez que el teléfono sonaba desde que habían llegado a Buenos Aires.

"¡Alma Luminar!" Reconoció la voz de inmediato, quería desconectar el teléfono. "¿Se puede saber qué estás haciendo de tu vida?"

"¿De dónde sacaste este número?" Pregunto Alma, evadiendo la pregunta de su madre.

"¿Te pensás que soy estúpida yo?" Dijo indignada. "Marta será tu tía, pero también es mi hermana, y no me va a mentir por un capricho tuyo."

"No es un capricho," Frunció el ceño. "Ma, déjame en paz, ¿No era eso lo que siempre me pediste?"

"Pero no así, no trabajas, no estudias, no haces nada Alma," Escucho la decepción en la voz de su madre, sintió un nudo en su garganta. "Mira a tu hermano, va a la facult-"

"No quiero escuchar sobre lo mucho que preferís a Felipe antes que a mí," Interrumpió, enojada. "Estoy haciendo lo que me gusta ma, me están pagando, y ya estoy grande para que me estés encima."

"Sí, tan grande que le pedís prestado el apartamento a la tía Marta," Su madre dijo en tono burlón. 

"Por lo menos le importo a la tía," Fito, quien escuchaba con atención la llamada, se acercó a Alma. Noto como sus ojos parecían haberse cristalizado.

"¿Vos pensás que preocuparme porque te vas de gira con un drogadicto es que no me importas?" La mujer argumento.

"Te importa tener control sobre mí, no te importo yo," Alma soltó las palabras, y con el silencio de su madre se sintió satisfecha. "Chau, ma." Colgó el teléfono.

"¿Estás bien?" Fito toco su brazo. 

"Sí," Dijo, pasando su mano por su mejilla, una lágrima caía. "Nada más no me esperaba que me llame hoy." Sintió como otra lágrima caía, miro a su amigo con ojos llorosos.

"Almita," Fito abrazo a la mujer, sintiendo como Alma rodeaba su cuello con sus brazos.

Alma hundió su cara entre el hombro y el cuello de Fito, sintiendo una descarga inmensa. Mientras su amigo acariciaba su espalda lentamente, la rosarina lloro todo lo que se había guardado. Frustración con su familia, con Charly, con los ensayos, con la situación que vivía en general. Hace mucho tiempo que no se encontraba con el sentimiento de libertad del que gozaba lentamente. Pero cuando analizaba más su alrededor, siempre encontraba a alguien intentando arrebatarlo. Ya sea Charly con su naturaleza posesiva o su madre queriendo tener control sobre su vida para dar una buena imagen. Alma estaba exhausta de hacer cosas para los demás, quería empezar a hacer lo que ella quisiera, cuando y como ella quisiera. Libertad.

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Febrero 1959

Charly observaba como sus padres abordaban el avión con destino a algún lugar de Europa, no le interesaba mucho a cuál. Y si sus padres se lo dijeran una vez más, él seguiría sin recordarlo. Estaba muy concentrado en el vacío que se generaba en su pecho. No era como si fuera a estar solo durante la ausencia de sus padres, pero no era lo mismo. Sus tías y sus mucamas no eran capaz de remplazar un segundo con su madre, ni aunque pasaran días y días jugando y mimándolo. Tampoco recibiría tanta atención como la que esperaba, ya que sus dos hermanos menores, unos de ellos recién nacido, la necesitaban más que él. Sentía como un puñal se retorcía en sus órganos, llenándolo del sentimiento de traición.