La festividad esta de las flores que bailan

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La primavera siguió su curso, con flores por todas partes y pajarillos cantando, era una de las temporadas más placenteras en Pueblo Pelicano, todo el sol sin el calor sofocante del verano, fresco y agradable. La vida de campo le estaba sentando bien a Oliver, a pesar de todo y estaba emocionado con la Danza Floral. El festival del huevo fue interesante cuanto menos, en privado pensó todas las bromas que uno podría hacer al respecto y se carcajeo en la comodidad de su hogar. Se abstuvo de comentarlas, no tenía una relación cercana con alguien como para mostrar ese lado de su humor. Se limitó a participar en las festividades, degustar algunos huevos (aguantar la risa), lamentarse por no poder comprar un conejo de felpa y volver a casa.

Se enteró de la danza cuando Haley la mencionó durante el Festival del Huevo, estaba curioso por verlo en persona, la idea era tierna y si pudiese bailar con cierto pelirrojo literato sería aún mejor.

Cuando llegó el día, estaba confundido buscando el lugar, recorrió todo el pueblo sin ver a sus nuevos vecinos por ningún lado. Al final dio con el lugar por casualidad, pero estaba tan escondido que varias veces pensó que se había perdido, hasta que vio los adornos y a Pierre vendiendo arreglos florales. Ya contaba con algunos ahorros sustanciosos, así que se compró un arreglo floral para tenerlo de recuerdo, era bonito.

Se preparó para a hablar con todo mundo, la cercanía era bien recibida, ya que normalmente tenía que recorrer todo el pueblo buscándolos.

Ver a todos interactuando en un solo lugar era interesante, empatiza con Clint, Emily no se notaba muy interesada en él. Pudo ver que Maru, Harvey y Penny hablaban, pero se dirigió un grupo de adultos, Demetrios, Jodi y Robin estaban hablando de la danza y al verlo acercarse lo incluyeron. Jodi le preguntó si bailaría ese día, Oliver no supo que decir con exactitud, ese era el plan aun si no conocía los pasos, ¿podría pedirle a alguien que baile con él e ir sobre la marcha? Esa sería una buena idea, se le daba bailar así que podría arreglárselas para no hacer el ridículo.

Mientras pensaba en eso divisó la silueta de Elliott de espaldas, lo que lo reanimó. Se despidió del trio para saludar a su... a Elliott, trató de no pensar en el comentario de Demetrios sobre los rituales de fertilidad.

Le sorprendió encontrar al hombre mirando el rio junto a Leah. La presencia de la mujer robó un poco del valor que había comenzado a reunir para pedirle a Elliott que bailara con él. La charla fue breve, apenas un saludo y un comentario sobre la festividad, encontró entrañable que Elliott vistiera un mejor atuendo en honor a la danza, aunque siempre se veía tan guapo y elegante. Oliver no podía evitar mirarlo demasiado. Sin saber cómo abordar el tema de la invitación se alejó del par para charlar con otras personas.

Desde esa vez que charlaron camino a la playa por la noche, continuó sus esfuerzos por acercase al pelirrojo, buscándolo y obsequiándole algunas de sus cosas favoritas. Estaba seguro de que de ser un flechazo ya se habría terminado, pero grata fue su sorpresa al encontrarse cada vez más interesado en él y esperanzado de que Elliott sintiera lo mismo.

Recorrió el evento hablando con todos, probando algunos bocadillos en compañía de Shanen, últimamente el hombre era solo un poco menos gruñón al hablarle y le dirigía una mirada más neutral que irritada, Oliver lo consideró un logro. Por lo que pudo escuchar sobre la danza, era una tradición desde hace muchas generaciones, tenía connotaciones románticas y era algo que los jóvenes hacían solo para tener contentos a los mayores, aunque algunos lo tomaban como una oportunidad para mostrar su interés por otra persona. No sabía cuál era el caso de Elliott, no quiso pensar en el hecho de que estaba junto a Leah, apartados del resto.

Después de hablar con todos, incluso con George, se dispuso a ir con Elliott, tomó una gran bocanada de aliento y se plantó a su lado.

—Oye, Elliott— Oliver comenzó suavemente, el pelirrojo se giró en su dirección un poco extrañado.

El romance de Oliver y ElliottDonde viven las historias. Descúbrelo ahora