- Pero bueno, mira quien ha despertado... ¿Has dormido bien? Bueno, no contestes, no me importa.
- ¿Qué está...? ¿Qué...? - Dijo Ricky tras despertarse en una sala completamente a oscuras. Aún le dolía la cabeza. Intentó levantarse, pero estaba atado a la silla de los tobillos, muñecas y abdomen
- Vamos a ver, detective... ¿Qué debería hacer contigo?
- ¿Detective...? ¿De qué estás...? Espera... ¿Fuiste tú quién liberó a la rata?
- ¿Yo? Por favor... ¿Crees que alguien que ha conseguido llevar a cabo un plan tan genial se ensuciaría las manos secuestrando a alguien? ¿Y tú estás investigando al Maestro?
Ricky estuvo a punto de decir "No, en relaidad es mi novia la que le investiga", hasta que se dio cuenta de que si lo hacía, Edur estaría en más problemad que él.
- Sí, soy yo el que lo investiga.
- Me parece sorprendente que consiguieras encontar una muestra de A.D.N. suya. Esa fue una de las raras ocasiones en las que salió a hacer trabajos por su cuenta, y suele ser muy precavido. Bueno, esa prueba ya no existe. Se siente.
Ricky se sintió impotente. Todo lo que Edur había conseguido era inútil. Pero, peor que eso, ella no sabía que estaba en peligro.
- ¿Cómo no van a ser Dave y Evan?
Edur no podía creerlo. Solo dejaron escapar una rata, e incluso dejaron A.D.N. en la escena. ¿Cómo no eran ellos?
- Ellos solo son los peones. El rey... El Maestro... No se quién es... Pero les oí hablar con él.
- ¿Sabes algo más que me pueda servir de algo?
- No... No le vi. Ni siquiera oí su voz. Solo sé que Dave y Evan son el eslabón más débil de la cadena.
- Vale... Claro. Alguien así no se dejaría ver.
De repente, Edur se fijó en que Ricky estaba tardando mucho. Miró la hora. Habían pasado unos veinte minutos.
- Perdona, Eleanor, pero tengo que ir a hacer una cosa.
- No te disculpes, soy yo lo que te ha robado tiempo.
Edur fue corriendo a los laboratorios, donde buscó por todas partes a Ricky y al científico con el que hablaron. No estaban por ninguna parte. Buscó por todas partes, pero no aparecían. Finalmente, decidio preguntarle a Natalia.
Al llegar a la puerta de su oficina, esperó un poco para armarse de valor antes de tocar la puerta.
- Adelante.
- Hola, Natalia... - Dijo Edur mientras entraba.
- ¿Qué pasa?
- ¿Sabes dónde está Ricky?
- ¿Por qué sabría yo eso?
- No lo sé. Pero estoy preocupada. Me temo que le hayan hecho algo malo.
- ¿Algo malo? ¿Quién? ¿Alguien que liberó una rata? No creo.
- Lo de la rata era parte de algo más grande. Más grande que yo, más grande que Ricky... Puede que incluso más que tú.
- Ya, claro. Y voy yo y me lo creo.
- El Maestro.
Natalia se quedó congelada.
- ¿El Maestro? ¿Esto es obra del Maestro?
- Sí.
- No sigas con la investigación. No os echaré, pero no sigas con la investigación.
- Pero Ricky... ¿Crees que le pueden haber hecho algo malo?
- No creo que le hayan hecho algo. Sé que le han hecho algo.
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Un Universo de Multiversos
Science FictionUna historia que narra la historia de Richard y Edurne en la oficina del universo de multiversos.