Un Universo de Multiversos

Una Emergencia Irresponsable

Lo primero que Ricky y Edur hicieron fue mirarse y soltar una risilla, para después recuperar la compostura y empezar a mirar a su alrededor buscando a dicha rata. Edur miró a su izquierda, donde vio a Carl siendo escoltado hacia la oficina de Natty, seguramente para evitar confusiones.

- ¡Seguridad! ¡Por aquí!

Edur miró en dirección a la voz, proveniente de John, un compañero que trabajaba unas mesas más hacia el sudeste, y vio a una rata gigante que estaba corriendo hacia una de las puertas, miró hacia la seguridad, y se dio cuenta de que no llegarían antes que la rata.

Tras esto, buscó en su mesa algo que lanzarle y acabó lanzándole la grapadora. La rata se giró, con una cara furiosa, y se quedó un instante buscando quién había hecho eso. Edur se quedó paralizada también analizando la situación.

Tras unos instantes, Edur decidió empezar a correr justo antes de que la rata hechara a correr detrás suya. Corrieron durante 17 segundos, justo antes de que Edur tropezara con un bolígrafo que se le había caído unas horas antes a alguien.

La rata la alcanzó y se abalanzó sobre ella, con unas intenciones completamente asesinas.

- ¡Squeaaaaak!

El ratón se desplomó encima de Edur, teniendo algún que otro espasmo. Para ese momento Edur ya se estaba tapando la cabeza con los brazos y había cerrado los ojos, por lo que no entendió lo que había pasado al principio. Cuando abrió los ojos, vio como un guardia sujetaba algo que (según ella creía recordar) se llamaba táser. Venía del universo 178LJ, y mandaba una corriente eléctrica a la víctima, con lo que normalmente se quedaba inconsciente.

- ¿Estás bien? - Dijo Ricky. Había estado observando en silencio, y solo se atrevió a acercarse cuando todo había terminado.

- Cobarde.

- Impulsiva.

Ricky le echó una mano para quitarse a la rata de encima y ayudó a levantarse a Edur.

- Estoy bien, pero no precisamente gracias a ti. - Dijo Edur con cara de mofa.

- Perdón, me quedé paralizado de miedo... - Dijo Ricky, claramente avergonzado.

- No pasa nada, estas cosas pasan. Supongo que sí que debería habérmelo pensado mejor.

- ¡Señorita Torres! ¡Venga aquí inmediatamente!

Edur suspiró. Natalia lo había visto todo, lo que la frustraba. Edur y Ricky fueron sin rechistar a la oficina de Natalia, quien parecía aún estar recomponiéndose del susto que le había dado la brecha de seguridad.

Los tres se sentaron, tras lo cual Natalia empezó a hablar.

- No tengo palabras para expresar cómo me siento ahora mismo, señorita Torres.

- Perdóneme, solo fue que-

- No estoy pidiendo una disculpa, señorita Torres, estoy felicitándola. Lo que ha hecho hoy ha sido impresionante.

- Gracias... - Tartamudeó Edur.

- Sin embargo, sí que hay un problema del que quiero hablar con usted. No, de hecho, quiero hablarlo con ustedes dos.

Ricky la miró confundido, mientras Edur se atrevió a preguntar.

- ¿De qué se trata?

- Resulta que este incidente habría sido imposible sin la imprudencia o maldad de uno de nuestros trabajadores.

- Vale, pero... ¿Qué tiene eso que ver con nosotros?

- Quiero que lo investiguen. Sea quien sea, ha incumplido una regla crucial: sellar la puerta después de terminar de usarla. Quiero tener un culpable al que amonestar.

- ¿Qué ganamos nosotros?

- Creo que ya lo sabe, señorita Torres.

- Así que son nuestros puestos de trabajo, ¿verdad? - Interrumpió Ricky.

- No, es algo distinto... - Contestó Edur.

- Siempre supe que de ustedes dos tú eras la inteligente, señorita Torres. Así es, no voy a despedirles si no lo hacen. Voy a destinarles al universo 83F.

Ricky se dió cuenta de la gravedad de la situación.

- ¡¿El 83F?! ¡¿En el que hay volcanes por doquier y monstruos que te desgarrarían la piel solo de mirarte?!

- Bueno, eso es un poco exagerado, pero lo de los volcanes es verdad.

Edur le puso una mano en el muslo a Ricky para tranquilizarlo.

- Bueno, supongo que no tenemos alternativa.

- Ah, una última cosa. Solo tenéis dos semanas. Si no lo encontráis para entonces, asumiré que no lo habéis intentado siquiera.

- Entendido, haremos todo lo posible por encontrar al responsable de este caos.

Ricky y Edur salieron de la oficina de la jefa, y se dirigieron a sus puestos de trabajo para discutir la estrategia a seguir.