-Confié en ti,no,aún lo hago,por que tú eres mi heroe-la hermosa hada de escasa ropa en esos duros momentos de sufriemiento para ambos se encontraba abrazada a su amado espadachín,ahora convertido en una hada con sus características ropas negras que le identificaban.
Estaba llorando en su hombro,laméntandose de todo lo que pudo evitarle y de lo débil e impotente que se sintió momento antes de ser salvado por el espititu de aquel al que no se sabía si podría guardar odio o respeto.
Una deuda de gratitud debía saldar con él,después de todo,si Kayaba Akihiko no hubiera creado la llamada carcel de Sword art online,el joven Kirigaya Kazuto jamás habría entrado en contacto con aquella muchacha de impresionantes cualidades imposibles de recopilar.
-No lo soy-lloró sin levantar la cabeza-No lo soy para nada-la joven iba a hablar de nuevo,pero el adorable muchacho levantó la cabeza antes de darle tiempo-Pero haré mi mejor esfuerzo para llegar a ser así.
A pesar de que Asuna de verdad deseaba dejarle claro todo lo fuerte que en verdad era,decidió que por el momento era adecuado dejar las cosas así,por lo que sonrío con los ojos llorosos y asintió.
-Bien,vamonos a casa-Kirito abrió la ventana del menú del GM,permitiendo a Asuna por fin abandonar la realidad virtual.Una vez encontrado el botón buscado,miró a su hada-Puede que sea de noche,pero iré pronto a tu habitación.
Asuna sonrió enternecida.
-Si,estaré esperando,eres la primera persona que quiero ver.
-Te sorprenderá como han cambiado las cosas
Asuna soltó una risita alegre,colocándo una mano en la mejilla de su amado.
-Iremos a todo tipo de lugares-sus ojos estaban siendo cubiertos por gruesas lágrimas que le estaban dificultando la visión.
-Si,por supuesto-aceptó con grandes ánimos mientras miraba atentamente a Asuna.
Asintió cansada y se dejó caer sobre el pecho de Kirito mientras una lágrima revoltosa se escurría por su mejilla,rápidamente limpiada por la mano enguantada de negro de su heroe dorado.
Kirito presionó el mencionado botón y una luz blanquezina cubrió el delicado cuerpo de la reina de las hadas,haciendo que sus cabellos largos y castaños danzaran como si el propio viento los hicieran bailar al son de la brisa.
Poco a poco,la silueta de la joven castaña fue desapareciendo hasta convertirse en brillo,como polvo de estrellas que se perdieron en la inmensidad negra de l lugar frío y desolado en el que se encontraban.
Al otro lado de la barrera que separa el mundo virtual del mundo real.
Poco a poco,la joven,ya no vicecomandante de la Hermandad de los Caballeros de la Sangre ni tampoco la reina de Alfheim Titania,comenzó a abrir los ojos pesadamente en la realidad que tanto había añorado en los primeros meses de su cautiverio en un videojuego mortal.
Ahora,la jovencita Yuuki Asuna,de 17 años de edad se encontraba plenamente consciente de donde se encontraba y de todo lo que había vivido gracias al casco de realidad virtual que ahora intentaba quitarse con las pocas fuerzas que le quedaban en los brazos,delgados y débiles,aunque bastante bien nutridos gracias a los cuidados intensivos proporcionados por la compañia de su padre,Shozou Yuuki.
Cuando consiguió liberar su cabeza del artefacto que la había aprisionado en un arrebato de rebeldía contra su madre a causa de la terrible presión a la que estaba sometida,lo depositó con cierto cariño sobre las blancas sábanas del hospital.
Este lugar no era nuevo,ya lo había visitado alguna vez por diferente motivos,por lo que no tardó en descubrir donde estaba.
Miró hacia la ventana,estaba nevando y,efectivamente,era de noche.
ESTÁS LEYENDO
Gracias...te amo
RomancePor fin podía verla,la luna,la verdadera luna de su verdadero mundo.No era una acumulación de datos y píxeles,era la real,podía verla claramente a través de la ventana del hospital que conocía desde hace tiempo. Quería llorar,de felicidad,pero aún n...