Kaiju Paradise

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Dormiste un par de minutos tratando de despejar tu mente, un rato después de lograr el sueño te despertaste y volviste a retomar tu misión, tenias que conseguir aquel fragmento con vida a toda costa.
Rápidamente saliste de tu habitación y rápidamente fuiste a la entrada para aquella caverna aprovechando el disturbio qué ocurrió por aquel animal.
Buscabas donde se encontraban aquellos trajes de radiación qué usaban los demás al entrar en las cavernas, pero después de un rato te rendiste y decidiste entrar sin el traje, al fin y al cavo los hombres que habías visto antes no llevaban trajes, usaste la tarjeta para abrir la puerta que llevaba a la caverna, mientras se abría la puerta lentamente sentías un enorme escalofrío, era como si estuvieran observandote, rápidamente tomaste un pico qué se encontraba en el piso y te dirigiste a los cristales qué aun tenían aquel brillo de color blanco pero que por alguna razón no iluminaba a su alrededor. Por miedo a tocarlo le pegaste con el pico al cristal, clavandolo debido a la fuerza que aplicaste y rápidamente empezó a atenuarse el brillo del cristal hasta dejar de emitirlo por completo, empezaste a empujar el pico para tratar de sacarlo del cristal, pero debido a la fuerza del golpe fue muy difícil sacarlo de ahí, usaste toda tu fuerza para sacar el pico qué cuando por fin lograste sacarlo te caíste ya qué pusiste todo tu peso en el, te levantaste un poco aturdid[] debido al golpe que te diste al caer, te levantaste y volteaste a ver al cristal para revisar el agujero qué hiciste con el pico, antes de que tocaras el cristal qué ya estaba totalmente apagado empezó a gotear un líquido gris.
Este líquido tenía una textura algo viscosa y pegajosa, te dio una mala pinta así que no quisiste tocar aquel liquido extraño y mejor te apartaste de el ocasionando qué te tropesaras con un pequeño cristal qué está a en el suelo. Te quedaste quiet[] un momento pensando en cómo hacer para conseguir con visa aquel cristal mientras te dabas pequeños golpes en la cabeza al puro estilo de Weenie the Pooh, después de un largo rato se te ocurrió picar la roca en donde se encontraba el cristal, así no le harías daño al cristal y podrías sacarlo.
Con la idea en mente agarraste el pico y empezaste a picar al rededor del cristal para poder extraerlo sin dañarlo, después de un rato lograste sacar el cristal con extremo cuidado y afortunadamente mantenía su brillo el cristal así que lo guardaste en una pequeña bolsa qué llevaste contigo y regresaste a tu recamara lo más silencioso posible.

Hola chicos y chicas, una disculpa por desaparecer como 3 o 4 meses creo, es que ya para que busco excusas...

Así es me quede dormido todo ese tiempo y apenas despierto :b

Pero bueno ya no importa, les prometo que trataré de sacar capítulos de forma más seguida pero en fin, hasta la próxima.

Y otra cosa, si ven errores de ortografía háganmelo saber para poder corregirlos.