En el pueblo de Karakura ronda un disparador desconocido que esta acabando con todos los Hollows de la ciudad, cuyos disparos parecen ser múltiples Zanpakutos.
La Shinigami Rukia esta en busca de la identidad de este hombre de poderes extraños, sin...
"Capitán Aizen, ¿esta seguro de ir al mundo humano?"- Ichimaru Gin hablaría, mientras observaba a su capitán quien solo miraba al frente. -"¿Por que lo dices, Gin?"- Con aburrimiento le responde. El tema de la visita al mundo humano ya estaba completamente preparado en su mente así que no tenia que preocuparse de nada mas que de Archer.
"Quiero decir, supongo ya sabrá como salvar a nuestro querido aliado de rojo de las manos del Gotei 13, pero... ¿Él sabe de su visita? Porque aunque parezca un hombre inteligente, incluso él podría cometer una falla que haría que toda la fachada de buen samaritano de su capitán fuera completamente destruida."
"Hmmm... Supongo que tienes razón. Si aparezco de improvisto, posiblemente su mirada se dirija hacia mi instantáneamente, y posiblemente el único que no se de cuenta de esto sea el capitán Kenpachi."- El hombre se tomaría su mentón, mientras pensaba en la posibilidad. No le importaba que su falsa mascara fuera rota en estos momentos cuando sus planes estaban a punto de concretarse.
Pero el problema venia en que eso haría que su dificultad en conseguir el Hogyoku aumentara a niveles agigantados; no imposible de lidiar, pero si seria un fastidio. Si tan solo lograra obtener este dispositivo ya lo demás no importaba.
Mientras tanto, evitaría que lograran ver su verdadera cara. -"Me dirigiré al mundo humano unas horas para hablar con Archer, volveré pronto. Mientras tanto hazte pasar por mi para Momo. Evita por tus mejores medios que los capitanes vayan al mundo humano sin mi."- Con eso, empieza a teclear rápidamente en su laboratorio. Las luces dejan de brillar, indicando que el funcionamiento había sido detenido.
"Hasta entonces, has que Tosen vigile que eso no despierte. Si lo hace, que instantáneamente me avise, después de todo solo yo puedo detenerlo."- Con esas palabras dichas, el capitán Aizen desaparece por un portal cubierto por una túnica; invento de Urahara Kisuke que se había apropiado.
Gin observa a su capitán irse con una sonrisa... Desaparece de su rostro una vez no hay rastro de Aizen. Sus ojos levemente abiertos se enfocan en la sala donde alguna vez estuvo "White"; un Vasto Lord que cambio por completo a la familia Kurosaki.
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White, uno de los Vasto Lords mas aterradores que alguna vez los Shinigamis pudieron pensar existiría; y a su vez el único al que la Sociedad de almas no pudo identificar debido a la interferencia de Aizen. Un enigma que no hacia mas que aterrar a los sobrevivientes de aquella noche.
Y aun así, este Vasto Lord no era nada frente a la criatura que actualmente estaba creando su capitán, Aizen. -"¿Hasta que punto piensa llegar?"- No puede comprenderlo. El deseo de liberarse de las "cadenas" que le ataban al plano mortal era tan fuerte que incluso no temía con meterse con fuerzas desconocidas; fuerzas incluso mas allá de la comprensión del capitán Yamamoto.
Un día de estos, esa búsqueda insaciable de conocimiento seria su perdición. Bueno, pero ese era tema para otra ocasión, por ahora debía buscar a la teniente Momo y evitar que logre llegar al lugar de reunión sin el capitán Aizen. -"Espero que Tousen este solo... Vaya que me incomoda la mirada de su teniente"- Se ríe para si mismo, recordando la creciente sospecha que expresaban sus ojos. No podía entender porque los Shinigami eran tan crueles con él. ¿Acaso era por su sonrisa?
