No te vayas sin mi (wolfstar)

Capitulo 6

"Martes y Jueves"

Si los buenos momentos no son más que sueños con un final, Remus Lupin se mantendría dormido lo suficiente como para olvidar despertar.

Después de aquella noche, el grupo de chicos decidio unir a Remus y a Lily como parte de ellos. Remus recuerda vagamente aquel momento, cuando Mary se acerco hacia ellos e hizo un discurso con su mejor tono de seriedad, los demás también se unieron, formando una ronda alrededor de los dos jóvenes.

- Esta noche - Empezo el discurso la chica, con el mentón en alto y su espalda recta - Nuestro exclusivo y único grupo de amigos acepta como nuevos integrantes a Remus Lupin y Lily Evans, para poder formar parte de esta hermosa familia disfuncional, es requerido el juramento sagrado - Estiro sus manos frente a ella con las palmas hacia arriba - Repitan conmigo, Yo, digan sus nombres

Si bien tanto Remus como Lily se reian, ambos estaban acostumbrados a ese tipo de actitudes debido al lugar donde crecieron, aceptaron con gusto el compromiso que se les ofrecia.

- Yo, Remus Lupin

- Yo, Lily Evans

- Juro solemnemente, aceptar en mi vida a Los Merodeadores, a Las Valkirias, y a Regulus, y unirme a sus aventuras ya sean buenas, malas o lleven a una muerte segura.

- Juramos solemnemente aceptar en nuestras vidas a Los Merodeadores, a Las Valkirias, y a Regulus, y unirnos a sus aventuras ya sean buenas, malas o lleven a una muerte segura.

- Prometo lealtad, y, por sobre todo, amor incondicional.

- Prometemos lealtad y, por sobre todo, amor icondicional.

Al terminar de pronunciar la última frase del juramente, todos los presentes festejaron y empezaron a aplaudir alegremente, la ronda se achico al punto de volverse un abrazo grupal mal organizado e incomodo.

Al momento de volver, Sirius los llevo en su auto, que al final resulto pertenecer a James, y esta vez no tuvo que ser acompañado por su hermano ya que este lo esperaria a la vuelta. Fue debido a eso que Remus se sento en el asiento del acompañante y Lily atrás. La pelirroja había bebido bastante y por ende termino dormida sobre el asiento como un niño pequeño, de vez en cuando Remus se aseguraba que siguiera respirando, solo por precaución.

El silencio reinaba dentro del coche, Remus tenia la necesidad de decir algo, aunque no odiase el silencio, algo dentro suyo le incitaba a iniciar una conversación. Podria empezar agradeciendo el ser invitado, algo que todavia no habia hecho y por lo que se recriminaba cuanto más se tardaba.

- Fue una linda...

- Te diver...

Ambos chicos intentaron hablar a la vez chocando sus palabras con las del otro, Sirius se rio ligeramente y Remus lo imito.

- Empieza tú - El pelinegro cedio gentilmente - Que estabas diciendo?

La vista de Sirius estaba fija al frente del camino, dejando ver su perfil entre las sombras de la noche. Remus lo observo solo por el gusto de tener la oportunidad de hacerlo.

- Fue una linda noche, la pase bien - Confeso el ojos miel

- Yo igual, les caiste bien a todos, estoy feliz por eso - Sirius respondio mirandolo por un segundo con una sonrisa, rápidamente volvio la vista al camino.