Beomgyu es una alfa que le gusta el rock y metal, mientras que Taehyun es amante de la música clásica y de las baladas.
Taehyun es un omega que le gusta leer, dibujar y tomar fotos con su cámara, mientras que a Beomgyu le gusta practicar con su guit...
Él tomó una gran cantidad de helado con su cuchara y lo puso en mí nariz.
— Mira, pareces un payaso - él empezó a reírse.
— ¿Ah sí? Bien seremos dos.
Tomé mí cuchara e hice lo mismo.
Él se quedó sorprendido y volvió a reír. Sin evitarlo, yo también me contagie.
Pude sentir miradas sobre nosotros.
— ¿Qué? ¿Acaso esto no es normal entre un alfa con su omega? Metanse en sus asuntos y dejen de mirarme a mí y a mí omega - dije en tono serio y demandante.
— Creo que lo mejor sería comer esto e irnos.
— No tranquilo - tomé una servilleta y limpie su nariz. — que no te importe las miradas juzgadoras de los demás. Solo sigamos en lo nuestro.
— Intentaré. No me gusta llamar la atención.
— Tranquilo, solo disfrutemos este momento y claro, los helados.
Taehyun asintió y comió de su helado. Yo hice lo mismo.
— Ehm, Beomgyu ¿Te puedo hacer una pregunta?
— Claro, dilo.
— ¿Te gusta alguien?
— Ehm, por el momento no.
Mentira.
— ¿Seguro?
— Sí. Estoy completamente seguro.
— Pero alguien debe de llamarte la atención.
— Sí, mí mamá cuando no le hago caso.
Bonito.
Se le veía bonito riendo.
— Ya enserio. ¿No te gusta nadie?
— No, no tengo mucha cabeza para eso, quizás en un futuro. ¿Y a ti te gusta alguien?
— No lo sé, no suelo distinguir bien mis sentimientos. Quizás los ignoro sin darme cuenta.
— Ya veo, estas confundido, ¿Cierto?
— Se podría decir que sí. Soy una persona que le cuesta aceptar algún sentimiento. Sobre todo cuando se trata de sentimientos fuertes como el amor y eso.
— Bueno, cada quien tiene su forma de sentir, aun así se me hace algo sorprendente que me hayas aceptado la salida, creí que me mandarías a la mierda.
— Bueno, es que, estaba de bueno humor, aparte, salir no es malo, somos amigos, hay que conocernos mejor para fortalecer nuestra relación, como amigos claro.
— Claro, amigos y bueno que- me autointerrumpi a causa de mi celular que empezó a sonar. — discúlpame unos minutos.
Me levante y me dirigí a la puerta de la heladería.
— ¿Felix? ¿Que paso? - conteste.
— Es que, el chico me invito a salir y no se que decirle, me puse nervioso y le colgué. Tu eres mas cercano a el, dime como tratarlo, por favor.
— Pense que era grave, bueno, el no tiene nada de especial, osea no es alguien que tiene prejuicios y eso, pero le gusta las personas sinceras, así que solo se tu mismo, vamos Felix, conquistalo.
— ¿Crees que me vaya bien?
— Te ira de maravilla, ya lo veras, vamos Felix, el mundo esta contigo.
— Gracias Beom, bueno, lo llamare, hasta luego.
— Me cuentas que sucede.
— Obviamente.
Colgué la llamada y volví a mi asiento.
— ¿Paso algo malo?
— No, nada, solo Felix que quería unos consejos.
— Ah, Felix.
— Si, ¿Estas bien? Te veo incomodo.
— No, para nada, solo que se me hizo raro que de la nada llame.
— Es que quería consejos para su cita.
— ¿Cita? - él cuestiono sorprendido.
— Así es, un alfa lo esta pretendiendo, el pobre se había asustado, pero ahora creo que le ira mejor.
— No sabia que tenia un alfa.
— Bueno están en eso, también por esa razón te deje un momento aquella vez en la casa de San.
— Oh que vergüenza.
— No tranquilo, no tengas vergüenza, fue un malentendido, así que bueno omega, vayámonos, te llevare a tu casa.
— Que caballeroso.
— Caballeroso es mi segundo nombre.
— Ridículo.
— No quieras iniciar una guerra de cosquillas, omega.
El solo rió.
¿Ya dije que se ve lindo?
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