Pesadillas con los ojos abiertos.

Capítulo V

Ya de noche, le vuelvo a contar a mi mamá. Ella como siempre tan religiosa, antes de dormir me da la bendición con agua bendita, me da una oración para que la reze, pero se que ella no me cree del todo o no le presta tanta atención; tiene su idea de:

-"Esas son tantas películas de terror que vez"

De pronto sea cierto o no, pero no quita el hecho de que me pase este tipo de cosas.

(...)

Después de esa noche no me paso más que yo recuerde. Todo a sido normal, no siento miedo. Y no se porqué, a mi jamas me han pasado cosas paranormales de ningún tipo, y siempre pensé que cuando me pasarán, me iba a convertir en una loca, pero no.

(...)

Estoy en décimo, todavía con 15 años.

Es Febrero, un viernes, tengo mucho sueño. Son las 10:00 pm, y aun estoy viéndo la tv como siempre.

Me voy al cuarto y enseguida caído profunda.

Me encuentro en un sueño, un poco raro.

«Estoy en una graduación, no se de quien. Estoy en la primera fila del lado de la esquina, donde al frente puedes ver toda la parte de logística y un pasillo largo, donde al lado se encuentra del escenario.

Me asombro al ver que mi mamá es la encargada de la presentación y la narración

-¡Y con ustedes, Camila! -Dice con gran euforia, llamándome para que pase a cantar.

Todos aplaudían, y yo sonreía. Parece que ya estuviera preparada para eso.

Me levanto y voy, me arrimo a las escaleras que están en la esquina, cuando siento que algo no me deja pasar al escenario. Volteo, y siento que algo me agarra por el cuello y me alza, con fuerza me golpea contra las paredes del pasillo anterior mencionado; y de repente, aparezco en mi habitación, aún alzada y con algo sujetándome por el cuello, me sigue golpeando contra las paredes de mi cuarto, no me puedo mover.

Me tira en mi cama y luego pasa la mano que tenía en mi cuello, por mi cabello y lo acaricia una vez, y luego se va, se va esa presencia invisible que no sabia lo que era.»

Me despierto en medio de la noche, asustada. Eran como las 2:30 am, y levanto de golpe de la cama y siento un dolor en el cuello, me asusta el hecho de saber que el cuello realmente si me incomodaba con el hecho de un supuesto "sueño".

Salí de inmediato de mi cuarto y me fui donde dormía mi mamá, realmente no quería dormir sola. Después de eso, no.