La Novia De Mi Hermano

3

MERLINA POV.

Al salir del baño encontré a Ajax acostado en mi cama, bufé odiaba que hiciera eso, él al darse cuenta de mi presencia se levantó caminando hasta mi completamente enojado.

-Deja de hacer eso-lo mire confundida, ahora de que hablaba el idiota este.

-¿Hacer qué?

-Ponerme en ridículo ante todos y más enfrente de ella-empujo

-Yo no te pongo en ridículo, tú solo te pones. Ser popular no significa que tengas resuelta tu boleta.

-Estas celosa de mi porque yo sí tengo amigos, no como tú rarita-volvió a empujar y eso ya me estaba comenzando a cabrear

-No vuelvas hacer eso-advertí

-¿Hacer que? ¿esto?

En cuanto su mano tocó mi hombro empujando, yo ya estaba sobre él a punto de propinarle un buen golpe en el rostro si no hubiera sido por Pericles que entró en ese momento y me quito de encima poniéndose entre los dos, Ajax me miraba molesto.

-¡Ya! padre y madre acaban de llegar y no creo sea bueno que los encuentren peleando-lo mire, suspirando ante su mirada de súplica alize mi ropa tomando mi chaqueta para salir.

Al bajar las escaleras madre estaba en la sala acomodando su nueva adquisición, tome las llaves de mi moto y mi mochila que estaba en la entrada me la colgué al hombro y salí, note el cielo nublado. Será mejor que me dé prisa.

Conduje hasta las afueras de la ciudad para tomar el camino que me llevara al bosque, necesitaba ir a mi refugio a calmarme un momento. Hace ya tiempo había descubierto una cueva en medio del bosque con ayuda de papá la habíamos convertido en una guarida, nadie más que él y yo sabíamos donde quedaba. Trate de no pensar en nada más, pero me fue inevitable no buscar en galeria fotos de Enid, ella amaba tomarse fotos y la mayoría las tomaba con mi teléfono.

¿Por qué me estaba pasando esto a mi? Nunca antes me había cuestionado ante la idea del amor, o lo que era amar y ser amado. Jamás había sentido las famosas mariposas o las manos sudorosas o que no pudieras pensar con claridad al tener a esa persona enfrente; pero ahora... no podía dejar de pensar en ella. Mi Enid.

Deje todo de lado acostándome en la manta sobre el suelo, cerré mis ojos imaginando un mundo donde pudiera estar con Enid, perdí la noción del tiempo y no supe cuando me quedé dormida.

El canto de los pájaros fue mi despertador, me dolía la espalda, tañe un ojo con mi puño abriendo los ojos de apoco para adaptar la luz, revise la hora en mi móvil.

Era tarde, las nueve de la mañana, lo bueno que hoy era sábado y no tenía instituto tomé mis cosas yendo hasta donde había dejado mi moto la puse en marcha hasta casa, necesitaba un baño y una buena siesta en mi camita. Apenas entré a casa la perra odiosa de Ajax brincó tirándome al suelo comenzando a lamber mi rostro.

- ¡Ajax quítame a tu perra de encima! -grite enojada

-Nen señorita O'Leary, ven-la perra se me quito de encima, gemí por el dolor en mi espalda.

Escuché risas provenientes del jardín trasero, todas eran familiares.

-Harán una parrillada y piscina así que cámbiate.

Con el dolor en mi espalda subí a mi habitación dándome una ducha rápida saque ropa de mi armario, me coloque un bikini negro resaltaba el color de mi piel, me puse unos shorts de mezclilla negra y alcance mi camisa blanca deje los botones abiertos, tome mis lentes de sol y baje pase por la cocina por un vaso de limonada y sali al jardín.

Pare en seco al ver a Enid con ese bikini azul rey, mi mente vagó por su perfecta figura, no ayudaba nada el hecho de que estaba saliendo de la piscina en cámara lenta. Trague grueso, su cabello rubio mojado, sus pechos redondos, firmes y perfectos, su torso plano y firme, sus largas piernas fueron lo que terminaron de hipnotizarme.

-Rica la limonada-di un brinco ante su repentina aparición- vaya amiga tenía que llegar yo y evitar que causaras un accidente con tanta baba que estabas tirando

-Idiota me has asustado-Yoko negó con la cabeza dando un sorbo de mi vaso de limonada ¿en qué momento me la ha quitado?-¿no deberías estar con tu "sirenita" ?

Usando el apodo que ella le dice de cariño a Divina, señaló a un lugar donde la chica, Bianca, Ajax y Xavier conversaban animadamente. Jalo de mi hasta llegar a una camilla de esas para tomar el sol, me senté en una aplicando bloqueador.

-Por tu cara de ostra daré por hecho que has vuelto a pelear con Ajax-bufé, en si no había sido una pelea solo tuvimos unas de esas charlas, me recosté en la camilla bajando mis lentes de sol cubriendo mi vista-hay Merlina si no te conociera tan bien diría que estas loca, bueno no, en definitiva estas loca, pero me refiero a mas loca.

-Callate.

Cuando la barbacoa estuvo lista tomamos asiento en el gran comedor del jardín. Todos estaban en pareja menos Murray padre de Enid, Han padre de Yoko, su esposa había muerto hace dos años, Pericles mi hermanito y yo odiaba esto.

-¿Dinos Merlina ya hay una chiquilla que repare ese corazón roto?

Todos los amigos de mis padres y mis amigos sabían de mis gustos sobre las mujeres, todos lo tomaron bien a mamá le costó entender, pero al final me apoyó y acepto eso fue porque cuando tenía quince inicie una relación con Lauren una compañera de las clases de chelo que tomaba en las tardes después del instituto, para mi suerte nunca la ame; aun en ese momento yo aún no entendía que era el amor y que tenía que sentir por ella.

Ella se mudó a Miami hace seis meses y nuestra relación terminó en buenos términos, Enid la odiaba y mis demás amigos la amaban, según la rubia tenía miedo a perder nuestra amistad, le asegure que eso nunca pasaría.

-Dora no es tiempo, a mi hija aun le duele-todos creían que eso me había destrozado, más porque cuando se fue me encerré en mi habitación tocando las canciones que solíamos tocar juntas. Claro que la seguía extrañando, fue la mejor consejera que pude tener, gracias a ella acepté mi amor por Enid.