only you - junior h

09.

Me despierto con un dolor insoportable de cabeza, volteo a mi lado y veo a Gabito dormido aún, me levanto de la cama buscando mi celular ya que desde anoche no lo vi más, lo había dejado en mi bolsa así que lo desbloqueo y veo que tengo varias llamadas perdidas de Junior y unos mensajes.

Estaba en shock no sabía si contestarle. Quise pensar en eso más tarde así que me metí a bañar, me cambié para así bajar y hacer el desayuno, también para tomarme una pastilla para el dolor de cabeza. Unos minutos más tarde veo cómo va bajando Gabito.
—Buenos dias bello durmiente—le digo, él se pone detrás de mi y me da un beso en la cabeza para después sentarse en la barra de la cocina.
—Eso huele delicioso—me dice mientras le pongo su plato frente a él y servir el mío para desayunar juntos.

Gabito y yo después de desayunar nos despedimos me dijo que tenía que irse por que necesitaba un baño y que más tarde me llamaba para ver si hacíamos algo por la noche, cuando se fue procedí a volver a mirar los mensajes que me había enviado Junior y decidí contestarle.

Dios, es tan terco no lo soporto, llegó a mi vida a hacerla un caos.

Pasaron los minutos y escuché como tocaron el timbre de mi casa, abrí y como imaginé era Junior.

—Sam dime que no se quedó aquí por favor—me dijo en cuanto me vio tomándome de los hombros cerrando la puerta detrás de él.
—Antonio tranquilízate que te pasa, me estas asustando—dije mientras me hacía para atrás.
—Sam solo dime, no soporto más verlos juntos que él te tome la mano y te tenga tan cerca, tan cerca como yo quisiera tenerte, solo dime Sam, se quedó aquí?—me dice con ojos suplicantes.
—S..si, aquí paso la noche—le dije temerosa, Junior me soltó de los hombros y retrocedió, en serio me estaba asustando.
—Y qué pasó? Te acostaste con él?—dice ya lo notaba molesto.
—Eso es algo que a ti no te interesa y creo que es mejor que te vayas, fue un error que vinieras—le dije jalándolo hacia la salida.
—Lo voy a matar—dice dirigiéndose apresurado a la salida de mi casa, en verdad estaba muy enojado, así que corro detrás de él antes de que se fuera y lo detengo.
—No, no me acoste con él pero de ser así no te debe de importar Antonio, tú y yo no somos nada y no tienes derecho de hacerle nada a él ni de venir a reclamarme a mi—le dije muy molesta y él se detuvo y me miró, me tomó de las mejillas y comenzó a hablar.
—Discúlpame Sam, tienes razón pero es que los celos me consumen cada que los veo juntos—me dice con un tono triste en su voz—Quiero que me des una oportunidad, yo puedo ser mejor que él ya te lo había dicho y te lo vuelvo a repetir, solo tienes que dejarme demostrártelo—pongo mis manos sobre las suyas que estaban en mi cara y lo miro directamente a los ojos, no sabía que decirle.