Capítulo V

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Con sus cosas en la mano, Alexandra busca por los pasillos de la universidad a Sue hasta que esta, al escucharla, sale del baño donde se encontraba

- Aquí...- avisa Sue sin mirar a la chica y tomando sus cosas en busca de algo entre ellas

- ¿Estás bien? - pregunta Alexandra preocupada sin dejar de observar a la chica que aún se encontraba buscando entre sus cosas - ¿Te ayudo?

- No encuentro mis pastillas para la ansiedad...- responde Sue nerviosa al no encontrarlas

- Sue...mírame - ordena Alexandra tomándole de las manos y apartando sus cosas a un lado - Mírame solamente a mi...olvídate de lo demás - indica la chica intentando tranquilizar a la contraria

Al levantar la vista la chica, Alexandra ve que su mirada está como perdida e incluso llena de dolor provocando en ella algo de lástima por la contraria, quien le hace caso e intenta tranquilizarse

- Lo siento yo...- intenta decir Sue, pero está se ve interrumpida por la chica que la abraza - Gracias...- agradece en un susurro entre los brazos de la contraria

Mientras tanto, Danitza, después de irse de la fuente algo indignada, se dirige hacia su taquilla para guardar sus cosas pero cuando la abre se encuentra con una pequeña caja negra, curiosa, decide abrirla y se encuentra con dos ojos estripados, ante eso la chica suelta rápidamente la caja acompañado de un grito, deseaba con todas sus fuerzas que los ojos fueran de animal y no de lo que creía que fueran.

Con lo ocurrido en la taquilla, Danitza se encontraba en comisaría donde Emma, Oliver y Violet acuden rápidamente

- ¿Que ha pasado ? - pregunta Violet preocupada al ver el rostro descompuesto de su hermana

- L-los ojos...los ojos de Carter...estaban en mi taquilla...- contesta la chica sin aún poder creerselo

- ¿Danitza Brown? - Llama uno de los policías el cual al ver a la chica levantarse, le dice - acompáñeme, le haremos una serie de preguntas

Ante las órdenes del policía, Danitza va hacia el sin antes recibir el apoyo de su hermana y los de sus amigos.

Mientras tanto, cayendo la noche, en la parte trasera de la residencia de estudiantes, un chico pelinegro se encontraba entre los contenedores de basura fumando lo que parecía un porro mientras utilizaba el móvil

- Buenas noches Jack...- dice una voz gutural que escucha el chico desde lejos

- Joder como coloca esto...- comenta el chico observando el porro

Después de dicho comentario, el chico escucha una risa siniestra cada vez más cerca

- Que gracioso eres Jack...a ti siempre te ha gustado hacer bromas...- comenta la voz cada vez más cerca provocando la risa del chico

- Si, es verdad, soy todo un bromista - contesta el chico bromeando.

Cuando menos se lo esperaba, una mano engauntada le tira el teléfono a un lado, ante eso el chico levanta la vista y se encuentra con la figura enmascarada que todo el mundo temía

- El respeto...es la educación universal...- termina de decir la figura antes de intentar apuñalar al chico, quien, por los pelos, esquiva el golpe

- ¡Déjame en paz! - exclama el chico intentando huir.

En su intento de huida, el chico tropieza con un par de bolsa de basura impidiendo que siga corriendo, oportunidad que aprovecha la figura enmascarada para ir hacia él y proporcionarle una apuñalada en el abdomen provocando que la sangre brotara de su boca. El chico, aún con orgullo, escupe a la figura, manchando de rojo la máscara blanca que portava, esto hace que la figura enmascarada suelte el cuchillo y estrangule con sus propias manos al chico provocando al fin su muerte.

 El chico, aún con orgullo, escupe a la figura, manchando de rojo la máscara blanca que portava, esto hace que la figura enmascarada suelte el cuchillo y estrangule con sus propias manos al chico provocando al fin su muerte

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El asesino del tarotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora