~Mi Primer Amor~ (Killugon♡)

~ En marcha ~

☆La hermosa ilustración que está de portada es de @ tiorrr1 ❤️✨️

POV Gon

Estoy muy ansioso, llevo todo el día esperando a que anochezca, para saber que paso con Killua… Aunque por la hora que es (12:00 de la noche en Estados Unidos / 02:00 de la tarde en Japón) es probable que Killua recién vaya en camino. Ay dios, me encantaría poder oír su voz, pero sé que es peligroso… Yurisa hace poco me entregó mi móvil y me tiene en la mira la mayoría del tiempo.

Pero me muero de ganas de hablar con Killua y explicarle todo. Decirle nuevamente que lo hice porque lo amo y que esto me rompió el corazón tanto como a él. De verdad me encantaría que las cosas fueran más fáciles, pero nos tocó tener un gran muro entre nosotros, que claramente es Yurisa. 

Además si logro hablar con él podré decirle mi plan y él el suyo. Aunque estoy seguro que su plan es muchísimo más arriesgado que el mío, por eso también debo saberlo, para detenerlo si es así. Lo que menos quiero es que él se arriesgue y le vuelva a suceder lo mismo que aquella vez… de solo pensarlo me tiembla el cuerpo. (Fin de su narración)

Mientras tanto, se quedó en su balcón mirando las estrellas mientras esperaba la llamada de su tía, avisando que Killua ya estaba en su casa.

Volviendo con Killua

El albino ya estaba a tres minutos de la casa de Mito, aunque podría haber llegado hace diez minutos, ya que se fue lo más lento posible, por un lado sentía ansiedad de estar en la casa del moreno, sabiendo que su relación había terminado, pero por el otro lado, quería correr al cuarto del moreno, tirarse en su cama que estaba poblada del aroma de Gon y no volver a salir de ahí. Para su buena o mala suerte, ya estaba al frente de la puerta y no sabía si tocar o esperar un poco más, sin embargo, no fue necesario para él decidir, ya que Mito lo estaba esperando y ella misma abrió la puerta.

—¡Por dios! has bajado muchísimo de peso. —Fue lo primero que dijo la pelinaranja al verlo. —Perdón, no debí decir eso, es solo que… —Lo miró con preocupación y tristeza. —Mejor entra mi niño, no hablemos afuera. —Permiso…amm gracias Mito san por tu preocupación y… perdón por no aparecerme y no contestar tus llamadas… —Dijo apenado, mientras bajaba el rostro como si quisiera esconderlo. —Killua ¿has comido algo? — Pregunto de la nada.—Claro, alguna que otra cosa… no se preocupe, no es para tanto. —Killua, hablo en serio. Estás demasiado delgado, no estabas así. ¿Tus padres acaso no lo notaron? —Ellos no pasan mucho tiempo en casa, se la pasan trabajando, por eso nunca se enteran de nada. —¿Y tus hermanos? —Bueno si… ellos y Retz me dijeron que había mucho de peso, pero no es algo que me importe mucho. —Te haré una pregunta y quiero que me contestes con la verdad. —El albino solo asintió.

—¿Qué harías si ves a Gon demacrado y con pérdida de peso? —Me preocuparía y haría lo que fuera posible para que vuelva a estar bien. —Respondió sin pensarlo. — ¿Y por qué no estaría bien? —Porque… no es algo sano estar así… —Exacto. Por lo tanto, tú también debes preocuparte de ti, porque antes de querer ayudar a alguien, uno tiene que estar sano. ¿Me entendiste? —Si Mito san… lamento haber dicho que no importaba, es solo que… realmente no me importaba como estaba, me sentía y me sigo sintiendo roto por dentro y no se como arreglar eso. —Las lágrimas comenzaron a correr por sus mejillas. —¿C-Cómo lo hiciste tú? Yo no soporto este horrible dolor que siento en mi pecho… Por favor, ayúdame. —La pelinaranja lo abrazó y le dijo. —Mi fortaleza fue Gon, yo tenía que cuidarlo y hacer que él fuera dentro de todo feliz, así que deje de lado esos sentimientos que tanto me dolían y solo me enfoque en él. —¿Y yo? ¿Qué puedo hacer? —Le preguntó mirándola directamente a sus ojos. —Tienes que ser fuerte por ti y así podrás darle tu fortaleza a Gon y él debe hacer lo mismo, ambos deben fortalecerse y así juntos nadie los podrá derribar. A veces hay que sobreponerse a las cosas para conseguir lo que uno quiere. —Pero… no puedo parar de llorar, lo intento, te lo juro. —Ser fuerte no significa no poder llorar. Eres un ser humano, es totalmente válido que llores o te sientas mal en este tipo de situaciones. Jamás minimices tus emociones. —Le dijo mientras acariciaba su cabello con ternura.