Mi chico bts

Mi secuestrador me abandona

Era un día soleado. Maluma se despertó como un príncipe, se cepilló los dientes, se bañó en su bañera gigante y se puso su ropa de calidad. Luego bajó a hacerse unas tostadas y vió a su secuestrador el cual apenas lo vió se vino y lo empezó a besar.

Cuando terminaron su sesión acalorada, yoongi acunó las mejillas del babyboy.
-Oye bebé, me tendré que ir durante 3 años para hacer negocios y conseguir más mercancía. -Suspiró en los labios del chiquito. Maluma al escuchar esto lo miró con lágrimas en sus ojos.

-n-no... esto... esto no puede ser posible!!!!! -Se separó del abrazó y empezó a llorar. -devuelveme a mi patria! te detesto coreano gonorréico carechimba!!!! -Estaba tan enojado que empezó a sentirse mareado y a punto de desmayarse.

Yoongi lo miró con una sonrisa burlona, pero antes de empezar a soltar carcajadas lo ayudó a sentarse.
-No te alteres bebé, es poco tiempo. -Tomó a Maluma de la cintura y lo subió en su regazo. -Prometo que volveré completo.

Mañuma se calmó y lo besó con pasión empezando a restregarse en el pene de Yoongi.
-Nya~ cogamos esta última vez~

Yoongi sonrió travieso. Este sería un día muy largo.

Finalmente llegó el día del vuelo, maluma veía a yoongi subiéndose en el avión mientras que jimin estaba parado a su lado. El guardaespaldas estrella de yoongi, su mano derecha, su más fiel extensión de carne de cuerpo: su otra mitad. Maluma estaba temblando como un gatito y jimin lo cogió por la cintura.

-Cálmate lindo porfavor no te alteres no quiero verte tan mal. -Como jimin era tan alto, recoató su barbilla en la calvita de maluma y abrazó su pecho. Maluma sonrió más tranquilo.
-G-gracias... -abrazó al hombre de 1.90 estatura y lloró en su hombro.
-Vamos a casa, cachorro.
-Esta bien, jimin.

Ahora en la casa, ya de noche, muma estaba tomando su baño nocturno y aprovechó para hacerle stream a Jihyo y una llamada a yoongi. Ese teléfono estaba en coreano por lo que era difícil usarlo, pero como era su teléfono transcoreano podía entenderlo casi.

Maluma salió de su baño nocturno y organizó ropa de yoongi en un nido, su olor a marihuana y cocaína lo calmaba mucho. Llamó a su amor sin darse cuenta que la puerta de su habitación se abría lentamente. Jimin muy enojado y celoso lo abrió. Veía desde lejos como su pequeño maluma dilataba su ano mientras hablaba con Yoongi.

-Hola amor. -Maluma dijo y si tuviera pelo lo estaría enroscamdo en sus dedos. -como fue tu viaje cariñito?

-Bien.

Estuvieron hablando un rato hasta que jimin no pudo más y entró en el cuarto, interrumpiendo la llamada. Maluma dejó caer su celular del susto y olvidó colgar. Jimin parecía un orangután.

-Babyboy; vas a ser mío, babyboy. -Jimin se subió en la cama y agarró a maluma por la cintura. Maluma lo miró serio y le pegó una cachetada.
-No te quiero jimin. Vete.
Esto solo prendió la furia de jimin, pero antes de que pudiera hacer algo, Yoongi se teletransporta desde mongolia y aparece por la puerta.

-Que te pasa maldito bastardo!????? puta mierda!!!! - jimin le gruñó y se subió rncima de toongi para pegarle un puño. Maluma se paró e intento separarlos.

-Basta!!! basta!!! dejen de pelear!!!!!! ahhhh~ mírame yoongi tú no eres así!!!!!!!!!!!!!!!!! -Gritó desesperado.

Yoongi y jimin se sepraraon muy golpeados y yoongi se separó de la pelea para abrazar a maluca. Los dos se abrazaron y lloraron.

Jimin muy celoso se mordió el ano y salió de la habitación. Yoongi salió de la habitación tambiés persiguiendo a jimin mientras boleaba bala con su escopeta como si fuera colombiano intentando lastimarlo y matarlo. Jimin se corrió esquivando las balas hasta salir de la mansión. Ya fuera, marcó un número ya muy conocido.

-Oi oi oi, que estás haciendo llamándome? -preguntó el desconocido desde la otra línea. Jimin sonrió malicioso.
-Hola bakugo. -Pussy voz de fuckboy. -Quiero unirme a tu mafia. Maluma será de nosotros y de nadie más...

Mientras tanto de vuelta en la mansión maluma se encontraba en su nido rascandose las bolas para calmar su ansiedad. Se sentía muy atacado y lo único que quería era que yoongi volviera en si. Yoongi volvió a aparecer por la puerta y abrazó a la maluma. Maluma lloraba y lloraba y chillaba, yoongi empezó a sentirse mal.

-Mirame bebé estl fue por tu bien quien sabe que hibiera pasado si no hubiese llegado. -Puso la caneza de maluma en su regazo con su nariz rozandole el pipí. Maluma sonrió más calmado y se restregó allí como un pequeño gatito.
-Gracias toongi.
-Ni hay que agradecer cariño, conmigo, nadie te hará daño...