Cinco Besos Para Ganarme Tu Confianza

4: Beso en el cuello

En una tarde lluviosa en el Bosque Prohibido, Neville Longbottom y Theo Nott se aventuraron en busca de una rara planta mágica que estaban estudiando para el proyecto de Herbología del Gryffindor. La lluvia caía suavemente sobre los árboles, creando una atmósfera íntima y tranquila.

—Esta lluvia nos tomó por sorpresa. Pero al menos parece que estamos solos acá —comentó Neville.

—Sí, fue inesperada. Pero este lugar tiene un encanto especial bajo la lluvia —dijo Theo.

Mientras exploraban en busca de la planta, Neville accidentalmente resbaló en el barro y cayó contra un árbol, riendo.

—¿Estás bien, Nev? ¿No te lastimaste? —le preguntó Theo entre risas.

—No, sólo estoy un poco sucio. Pero ¿sabés qué? Esta planta debe estar cerca. Podemos sentirnos afortunados si la encontramos en estas condiciones —dijo Neville, levantándose.

—Tenés razón. Sigamos buscando —asintió Theo.

Después de un rato, encontraron la planta que estaban buscando, justo en una zona donde los árboles se abren para dejar entrar la lluvia. Neville se acercó a la planta emocionado, pero en el proceso, una rama baja lo golpea en el cuello.

—Parece que los árboles también están emocionados con esta planta —se rió Longbottom.

—Sí, parece que sí. Pero, ¿estás bien? Ese golpe fue un poco inesperado —le dijo Theo, un poco preocupado por su "amigo".

—Bueno, supongo que los árboles no son los únicos emocionados —sonrió Neville.

Nott se acercó a Neville con una mirada llena de complicidad y, de repente, se inclinó y depositó un beso suave en el cuello de Neville. Este sintió un escalofrío recorriendo su piel mientras la lluvia seguía cayendo a su alrededor. Fue... agradable y sorpresivo, no encontraba otra palabra para describirlo.

—Eso fue... inesperado —susurró.

—No pude resistirme. Tu cuello parecía necesitar un poco de atención —sonrió con picardía Theo.

—Bueno, no puedo decir que no haya sido agradable —dijo Neville, sonrojado.

La lluvia siguió cayendo, creando un ambiente mágico mientras Longbottom y Nott compartían una mirada llena de significado. Ese beso en el cuello se convirtió en un momento especial entre ellos, un momento espontáneo y lleno de emoción en medio del bosque, en medio de lluvia.