— Príncipe.
— Príncipe.
— Príncipe.
Todo el mundo a su paso le hacía una reverencia al pequeño príncipe de cuatro años de edad. Quien caminaba a pequeños pasos por el gran palacio de Tierra.
— ¡Ayuda!. — Gritó Wei Ying haciendo que una de las omegas que estaba limpiando un jarrón se acerque de inmediato.
— ¿Necesita algo, alteza?. — Preguntó ella haciendo una rápida reverencia.
— Me caso subiendo las escaleras, ¡Upa!. — Dijo estirando sus bracitos abriendo y cerramos sus manitos.
La Omega rápidamente lo tomó en brazos con delicadeza y subió las escaleras con cuidado, al llegar al segundo piso del palacio dejó al príncipe en el suelo nuevamente arreglando sus ropas.
— Gracias, muy amable. — Dijo el príncipe de para luego caminar hacia la primer habitación que había allí.
Los guardias le abrieron la puerta al pequeño cuando este les hizo una seña con dos de sus deditos. Entró a aquella gran habitación.
— ¡Mami!. — Gritó haciendo que Yibo se levante inmediatamente de su cama y camine a paso rápido hacia el pequeño.
Una vez frente a este le hizo una reverencia y se arrodilló delicadamente en el suelo para quedar a la altura del príncipe. —Yo no soy su mamá, pero dígame en que puedo servirle.
— Desde ahora eres mami, vamos a pasear por los arrededores. — Se dió la media vuelta haciendo que Yibo rápidamente lo siga.
Al llegar a las escaleras el alfa le ofreció su mano y ambos bajaron lentamente por las largas escaleras. Al llegar al final de ellas encontraron a un alfa del harem de Zhan quién iba a subir por las escaleras que llevaban al piso de su habitación.
— Príncipe, ¿Qué lo trae por aquí?. — Dijo amablemente.
— Vine por mami, me va a llevar a pasear. ¿Te molesta?.
El alfa rápidamente negó. — No, claro que no.
— Ah bueno, ten buena tarde. — Siguió caminando dejando a Yibo con la boca abierta.
Si ese niño era así ahora no sé imaginaba como sería cuando sea más grande. Al salir del palacio recorrieron muchos lugares, Wei Ying iba dándole un recorrido al alfa quién escuchaba todo con atención.
Y al llegar la noche Wei Ying lo llevo al palacio Principal. — Me vas a contar un cuento para dormir. — Dijo mientras dejaba que la omega lo vistiera con un pijama de seda.
— Claro, usted elija el cuento y yo se lo leo. — Sonrío dulcemente el alfa.
— No, esos ya me los sé todos de memoria. — Y Yibo casi se desmaya, fijo ese niño tenía cuentos infantiles que aún ni siquiera habían salido al mercado y ¿decía que ya se los sabía todos de memoria?. — Quiero que me cuentes uno que salga de tu imaginación.
El cachorro se acostó en su cama y palmeteó a su lado para darle el permiso al alfa de acostarse allí, Yibo rápidamente lo hizo y tomó el atrevimiento de cariciar los cabellos de Wei Ying.
— Habia una vez...
«Habia una vez un Omega el cual añoraba tener muchos cachorros junto a su esposo, pero cada vez que el Omega quedaba en espera por alguna razón los perdía.
Cansados de esto el alfa fue a un bosque y le gritó a la luna: "¡Solo te pido un cachorro! ¿Es mucho que le puedas concebir este deseo a tu hijo?". Entonces la luna brilló en todo su esplendor y le dijo al alfa: "Hijo mío, te daré un cachorro, el cachorro más hermoso de todos pero a cambio te pido que ese cachorro sea hijo mío". El alfa aceptó la condición de la luna y así pudo tener a su cachorro.
Era un cachorro totalmente hermoso, Rubio de unos preciosos ojos azules y al presentarse se presentó como un hermoso Omega Líder, era el primero de muchos, nadie sabía por qué era eso. Una guerra se desató en todo el mundo.
Pero el Omega alzó su voz y pasó aquella guerra justo cuando el sol tocó su punto más alto en el cielo. Los cabellos del omega brillaron en un hermoso color dorado.
Con el tiempo el Omega se volvió un Rey para muchos hasta que fue coronado como uno por su propio pueblo, de ahí se formó el reino Verano, sus hijos tomaron distintos caminos, uno hacia el Sur, otro hacia el Este, otro para el Oeste y solo uno se quedó en el Norte en donde estaba el Reino Verano.
Con el tiempo se crearon reinos distintos y se olvidó que los primeros reyes de Otoño, Invierno y Primavera eran hermanos, hijos del Rey Omega del reino Verano, y los reinos se distanciaron cada vez más...»
Yibo miró al príncipe quien estaba profundamente dormido abrazado a él, sonrío y poco a poco cayó el el también en un profundo sueño.
Zhan quién iba a darle las buenas noches a su hijo se encontró con aquella sorpresa, más no le molestó, se acercó a ellos y acomodó al alfa con delicadeza en la cama para luego cubrirlo bien los las sábanas.
Dejó un beso en la frente de su hijo y salió de allí con una sonrisa en sus labios.
Y es que casi nadie era capaz de contar una buena historia como para que Wei Ying se quedara dormido a mitad de esta, tampoco acariciaban sus cabellos.
Esa era la debilidad de Wei Ying al igual que la de Zhan. Wei Ying hacia lo mismo con todos los alfas nuevos que llevaban, los llevaba a un recorrido y luego les pedía un cuento inventado por los mismos alfas para así poder dormir alegando que él ya se sabía de memoria todos los cuentos, cuando en realidad...
Era mentira, Jamás se le había leído a Wei Ying alguno de esos cuentos que estaban allí, el cachorro siempre escogia el mismo cuento para que Zhan se lo sea mientras acaricia sus cabellos.
Sí, ese pequeño cachorro era muy inteligente, aunque parezca inocente Wei Ying siempre tenía un plan bajo la manga, y nada se le escapaba al chiquito. El se sabía todas las movidas de ambos palacios.
¿Wei Ying? Wei Ying era una copia perfecta de Zhan sin siquiera ser hijo biológico suyo.

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Rey Omega
FanfictionXiao Zhan es un Omega Líder Rey del reino otoño y en uno de sus paseos al pueblo encontró a su alfa. - ¡Alto!. traigan a ese alfa al palacio... ADAPTACIÓN Adaptación autorizada por la/el autor/a 🌱LittleAgustD ♡ @LittleAgustD TODOS LOS CREDITOS PARA...