Prólogo

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Cuando las personas leen mis escritos me siento verdaderamente emocionado, suelo recibir pocos, pero valiosos comentarios respecto a las historias que surgen de mi imaginación. ¿Decir que es mi imaginación es absurdo? De hecho, sí, la humanidad no es inteligente. Todo el arte que rodea al mundo es un susurro diminuto de un regalo de los seres celestiales.

Lo sé, parezco un loco. Puede que lo sea. Aunque el motivo de esto es solo agradecer por aquellos que no me molestan por ser tan ‘fantasioso’. Una de las preguntas más frecuentes que suelen hacerme aquellos que hablan conmigo por redes sociales es ‘¿por qué solo puedes escribir historias con finales felices?’ Mi respuesta es la misma.

El mundo está lleno de demasiada tristeza, miseria, dolor como para usar la ficción para generar más malos sentimientos.

Aunque uso mis escritos para mandar mensajes positivos, solo espero que con estas palabras sacien su curiosidad respecto a eso. Fue una respuesta sencilla.

Bueno… eso es todo, cierto, aprovecho el espacio para pedir perdón por mi inactividad intenté buscar otro hobby además de escribir… fracasé.

Esperen pacientemente mis nuevas noticias.

dogPark.

Kyungsoo bajo su celular, miró la espalda de Chanyeol que estaba viendo videos en su computadora. Así es, su mejor amigo era ese para nada famoso escritor conocido en las redes como dogPark. Cuando un día descubrió su cuenta no resistió la curiosidad de leerle, extrañamente todo era muy romántico, dulce y a pesar de algunas pinceladas de sexo todo surgía siempre en mundos muy ‘utópicos’. Sin intención termino volviéndose su fan. 

—Yeol…— Habló con voz suave.

—¿Mmmh?

—¿Realmente escribes solo cosas felices por ese motivo?

—¿Habría otro?

—No lo sé, una vez dijiste que escribir era tu terapia.

Chanyeol no respondió de inmediato, en cambio se giró en la silla y con una brillante sonrisa hablo en voz baja.

—No hagas preguntas cuyas respuestas no van a satisfacerte, Soosie. Si me disculpas acabo de recordar que mi hermana me pidió comprarle maquillaje.

—¡Te acompaño!

—No esta vez, Soo. Iré solo.

Kyungsoo, fiel a sus principios de saberle dar espacio a su amigo cuando este lo requería no siguió insistiendo. Cuando le vio salir de la habitación lo medito unos largos minutos, si lo pensaba arduamente podría comprender la actitud de su amigo… ¿verdad? Solo era necesario recordar lo que habían vivido y de paso las pistas en los libros escritos por Chanyeol. Para un verdadero fan no sería difícil saber cómo pensaba.

El secreto del escritor|| ChanSoo [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora