Acomplejado|| ChanSoo [Terminada]

IV

Con mi rostro completamente rojo, tome su mano y lo guíe hasta mi departamento. Agradezco que Chanyeol solo aceptara sin hacer demasiadas preguntas. Fue abrir la puerta para sentir sus labios besar mi cuello.

Mis zapatos fueron a parar a algún rincón, caminamos desesperados hasta mi cama donde me coloco de lado. El atrás de mi no paraba de oler mi cuello y lamer mi piel, su mano apretó mi muslo y fácilmente deslizo hacia abajo mi pantalón, lo siento juguetear con mis pezones aún por encima de la camisa y como su mano caliente aprieta mi piel desnuda.

Poco a poco me termina llevando hasta el abismo del placer, su respiración caliente altera mis sentidos y provoca en mi varios gemidos gruesos provenientes de mi garganta.

Cubro mi rostro y jadeo por las deliciosas sensaciones que recorren mi cuerpo, puedo sentir su erección contra mi trasero no me quedo atrás y meneo mi cintura en círculos añorando por más.

—¿Tienes miedo? — Me quita los lentes poniéndolos con cuidado en la mesa de noche, esta tan cerca que puedo notar su sonrojo. Cambia de posición colocándose sobre mi, libera los botones de mi camisa blanca su nariz rozo mis pezones y luego los lamio, succionando mi piel mientras rozaba su pene contra mi muslo.

—No... solo es mi primera vez.  — cubro mi boca y noto la mirada de Chanyeol, la forma en que su sonrisa se amplia y su hoyuelo se hace más visible, es brillante.

—Es un alivio... no dejes que nadie más que yo te huela. — Sus grandes manos acunan mi rostro y besa mi frente, bajando hasta poder juntar nuestros labios.

Soy inexperto, es cierto pero aunque no tengo con quien compararlo los besos de Chanyeol son magníficos, la forma en la que mueve su lengua contra la mía al mismo ritmo en que roza mi trasero me enloquece. Acaricio su nuca, siento su sudor pero no es asqueroso me gusta sentirlo tan caliente y más si es por mi.

Nuestras prendas de ropa comienzan a abandonar nuestro cuerpo, cubro mi intimidad al quedar desnudo Chanyeol no me presiona, solo me besa con delicadeza, con dulzura, abriendo mis piernas y lamiendo mi esencia.

—Tú olor se concentra aquí — Su lengua recorre mi pene, una corriente logra que me encorve haciendo que solo sonría y continúe con sus toques, humedeciendo sus dedos para ingresarlos en mi interior.

—Yeol...

—Me gusta que me digas así.

Estiro mis brazos pidiendo ser sostenido por él, cosa que hace para después lentamente ingresar su pene en mí, duro, palpitante, húmedo, así siento si miembro dentro de mi cuerpo. Arrugo los ojos y hundo mis uñas contra su espalda desnuda. Duele, pero me gusta.

—Relájate Soo... no me moveré hasta que estés listo — Aprieto su cintura con mis piernas meneándome ligeramente, no quiero que pare solo deseo sentirlo rozando hasta el fondo.

—Yeol, muévete — Me sorprendo a mi mismo al notar como mi voz es mucho más ronca, Chanyeol besa mi mejilla, bajando a mi cuello lo escucho respirar mi aroma y puedo sentir como se vuelve más grande en mi interior. Jadeo, y mis dedos recorren de arriba abajo su bien trabajada espalda.

Ladeo la cabeza permitiéndole que me bese el cuello, noto sus tatuajes eso lo hace más sexy. Ahora me gustaría tener amigos para fanfarronear "Hice el amor con Park Chanyeol, y es jodidamente bueno en eso" sonrió ante la sola idea pero mi cabeza vuelve a la realidad cuando las penetraciones se hacen más intensas.

Jamás me había sentido tan bien, tocarme a mi mismo nunca me ha excitado tanto pero sentirme tan protegido ante este hermoso hombre me pone al limite. Nunca he sido atlético, pero me sorprendo al notar lo elástico que soy, la forma en la que mis piernas son abiertas por Chanyeol y como mientras vuelve mi interior un desastre besa mis pantorrillas ¿acaso es posible?

No soy para nada resistente, pero aquí estoy sin saber cuanto tiempo ha pasado y el sexy hombre que me penetra con violencia aprieta la base de mi pene retrasando mi orgasmo generando un sentimiento de sumisión que me fascina, quiero ser controlado por él, quiero que me muerda, me marque, me huela, me apriete y me haga todo suyo.

—Soo... ya casi. — Anuncia en voz gutural, soltando mis piernas para alzarme de la cadera y ponerme en su regazo, abro los ojos y mi cabeza cae hacia atrás, no respondo pero me gustaría decirle que yo también lo estoy.

Ahora soy yo quien tiene la cabeza hundida entre su cuello, lamiendo su sudor, es dulce y adictivo, mis nalgas son apretadas son fuerza por los masculinos dedos de Chanyeol, una de sus manos se aparta y siento como me nalguea, haciéndome soltar un pequeño grito seguido del mejor orgasmo de mi vida.

Aprieto los ojos y gimo su nombre en voz alta, para luego morder su hombro.

—Yeol~

Repito cansado pero los movimientos no se detienen, soy yo el que sigue saltando sobre su pene y el me separa un poco para besarme necesitado, gime contra mis labios, seguido siento un liquido caliente en mi interior que hace que tenga un orgasmo seco.
Mis piernas están débiles, mis ojos pesados y probablemente he dejado mi sudor en todos lados.

—Hueles bien.

Sonrío y caigo completamente rendido en sus fuertes brazos.