Nuestra Marea (Sasuke X Sakura

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El sol alumbraba toda la habitación, se podía ver dos cuerpos desnudos siendo tapados por las sábanas.

Sasuke quien se encontraba despierta, estaba admirando a su mujer. Anoche lo habían echo varias veces hasta que sus cuerpos no pudieron más, y pensar que ella había pasado por tanto.

Estaba furioso, quería buscar a Deidara y hacerle pagar por todo lo que le hizo a su cerezo.

Nunca se imaginó que el pasado de Sakura, fuera algo tan doloroso, por eso Sasuke quiso hacerle el amor, quería hacerla entender que él. No le importaba su pasado, le importaba el presente y la vida que quería llevar junto a ella.

Anoche se lo demostró, besando cada parte de su cuerpo, dejando marcas y chupetones, solo para demostrar que ella es solamente suya.

Su mujer y futura madre de sus hijos, y mataria a todo aquel que intentara hacerle daño.

El azabache beso el hombro desnudo de la pelirrosa, con ese dulce acto. Sakura abrió sus ojos, encontrándose con la profunda mirada del azabache, quien tenía una brillo intenso y hermoso en esos obres negros.

- buenos días preciosa- susurro el pelinegro con una sonrisa en sus labios.

- buenos días- le devolvió el saludo- tenemos que levantarnos, hay muchas cosas que debemos hacer hoy.

Sakura hizo un intento de incorporarse pero el azabache la detuvo, abrazándola con fuerza.

- quedemos un rato más así- murmuró él, al momento que repartía besos por todo el cuerpo de la pelirrosa- eres realmente hermosa Sakura.

Con cada caricia y beso, hacia que Sakura no pensara con claridad, dejándose llevar por esa muestra de cariño, que le estaba demostrando su hombre.

Ambos se miraron por unos segundos, para luego atacar con desesperación sus labios.

Nunca tendrían suficiente, ni siquiera porque le haya echo el amor toda la noche, querían parar, sus cuerpos reclamaban la cercanía del otro, sus besos encendía cada parte de su piel.

Haciendo que una llama los rodeará a ambos.

- Sakura, todo está listo para partir, lo chicos los están esperando en el barco- hablo Izumi tocando la puerta, pues algo le decía que no debía entrar.

Sakura se separo de Sasuke, como si de fuego se tratase, al mismo tiempo que sus mejillas se calientaban de la vergüenza.

- enseguida salimos- aviso la pelirrosa, quien se levantó de la cama, con la atenta mirada del pelinegro- Sasuke levántate, tenemos que ir a donde estan los chicos, para decirles lo que planeamos hacer.

Comento ella al mismo tiempo que se vestía. Sasuke quiso protestar pues habían interrumpido un momento íntimo con su mujer, y eso lo acababa de frustrar.

- ¿Sasuke?- dijo la chica mirando al pelinegro, quien tenía una expresión indescifrable.

El azabache se levantó de la cama y se acercó a la pelirrosa, para así robarle un casto besó.

- cuando estemos a solas, terminaremos lo que empezamos- susurro en su oído, para luego apartarse y empezar a vestirse.

El sonrojo de la chica aumento con aquel comentario de Sasuke, una vez que se vistieron, salieron de la habitación, y empezaron a caminar por los pasillos, en completo silencio.

No necesitaban palabras, pues solo querían difrutar la compañía del otro.

Al llegar a donde se encontraba los demás, desayunaron y charlaron por un rato, luego de eso decidieron que ya era momento que partir.