Tras ser derrotado Shinnok estaba siendo torturado por Raiden en el templo del cielo.
Shinnok: -Tu... deberías agradecerme, Raiden. Nuestra batalla te cambio. Para bien.
Al dios del trueno no le importaron esas palabras siguió atormentando a su némesis con sus poderes de rayos.
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Raiden: -Cállate, Shinnok.
Shinnok: -Pero usas mi amuleto. Al fin aceptas la verdad que los Dioses antiguos niegan... La verdad que me costó el exilio.
Raiden: -La verdad que acepto Shinnok es que la piedad se desperdicia en quienes contaminan la Tierra. Destruiré a nuestros enemigos antes de que ellos lo hagan. Empezando contigo.
Shinnok: -¿Cómo Raiden? Ni tu puedes con un dios antiguo.
Raiden: -Hay destinos peores que la muerte.
Raiden canalizando su poder en su mano para formar una cuchilla de electricidad la cual uso para decapitar a su enemigo sin piedad.
La cabeza cercenada de Shinnok cayó desprendida de su cuerpo a continuación el dios del trueno la coloco en una mesa de piedra.
Raiden: -Te entregare a Liu Kang y a sus esbirros del Infierno. Una advertencia de mi ira.
Y sin nada más que hacer, Raiden desapareció en un trueno.
Tras unos momentos la lluvia que caía sobre el templo por arte de magia las gotas que descendían se detuvieron de repente cuando una mujer alta de aspecto imponente y calva se acercaba a la cabeza.
???: -Este no era tu destino Shinnok. De nuevo el dios del trueno daño el equilibrio de la historia. Pero comprende que el arco del universo se dobla a mi voluntad... Es solo cuestión de tiempo.
