ADD [Suguru Geto y tú]

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Día: Sábado.
Hora: 2 pm

Geto te esperaba en la entrada de la zona comercial, no sabía con exactitud porque te pidió reunirse ahí, su mente pensó otra cosa pero no pudo decir, tal vez si te hubiera dicho de ir a tu casa a ver tu colección y no que le recomendarás tiendas, sería distinto pero pasar el  día contigo, era pasar el día contigo.

Rápido te vió, te veías preciosa, ese pantalón negro con el suéter verde te hacían ver demasiado hermosa, sentía su corazón palpitar muy rápido, ¿por qué se sentía así contigo? No habías hecho mucho, te consideraba rara gracias a todo lo que habías dicho y aún así quería hablar contigo e invitarte a tantas salidas como le fueran posible.

Y lo supo, cuando te vió sonreír, la sonrisa más  hermosa que pudo ver alguna vez.

ーHola Geto-san.

Otra vez esa pequeña emoción en tu voz, estaba muerto.

Rip por segunda vez para Suguru Geto.

ーPuedes llamarme por mi nombre, ____.

ーLo pensaré.

Bien, el silencio reinó en los dos, que incómodo, Geto traía actitud, lo malo es que no sabía cómo aplicarlo contigo.

ーBueno, vamos a la tienda.

Dijiste rompiendo el hilo de sus pensamientos, solo asintió y comenzó a seguirte.

ー¿Y qué quieres comprar?

Giraste tu rostro para verlo, la interrogante creciendo en tu ser, Geto era Geto, guapo, alto, ajá.

ーAlgo para el cumpleaños de Satoru.

ー¿Cumple años?

ーSí, pronto.

Los nervios se instalaban, si era verdad que Gojo cumplía años.

En diciembre.

ーOh, que bueno que lo dices, también podría comprarle algo. He visto su llavero de Digimon, es lindo.

Espera, ¿qué? Él también quería un regalo tuyo, un mini puchero apareció en sus labios, maldito Satoru friki, lo odiaba.

ー¿Algo más que quieras comprar?

ーNo lo sé, creo que cuando estemos en la tienda, veré si algo más.

Llegaron rápido al lugar, como lo imaginó, solo había acompañado a Gojo una vez en toda su vida. Se prometió no volver a pisar esas tiendas, pero, tu eres su excepción, en todo.

Entraron al lugar, estaba fresco, nada fuera de lo común, como otra tienda normal.

ーBien, vamos a buscar un regalo para Gojo-san.

Ahora estaba celoso, él quería un regalo tuyo sí o sí, te seguía detrás, te escuchaba hablar. Recomendaciones y más recomendaciones.

Estaba en el infierno pero contigo a su lado era el paraíso, bueno, eres un ángel en ese infierno.

ーAquí está la sección de Digimon, ¿qué crees que le guste?

Fuck, muchas cosas, videojuegos, ¿tenía manga? Ni siquiera sabía, muñecos, peluches, ¿ediciones especiales?

ーAh, wow, a ver, que escoger.

Ni siquiera miró todo, solo agarró una caja al azar. ¿Qué mierda es eso? Bandai Shodo: Digimon - Magnaangemon Figura De Accion.

Era mejor no cuestionar.

ーEsto, estará bien. Hay que irnos.

Se giró y alzaste una ceja, era muy raro el pelinegro. No lo seguiste, empezaste a ver todo lo que había y elegiste una caja con cartas, lucía bien. Te gustó bastante.

Suguru al darse cuenta que no fuiste detrás de él se regresó, ¿cómo es posible que camines tan rápido? Cuando volvió al área donde estaban anteriormente, ya no estabas.

Lástima para Geto, ya estabas ahí y comprarías los mangas que te faltaban. Lo perdiste de vista pero confiabas en que aparecería solo.

Habías tomado algunos tomos, llevabas 7 tomos en total. Ya con todo en mano, viste a un Geto desesperado aparecer frente a ti.

ーCreí que me estabas siguiendo.

El tono de voz era distinto, un tono de pues preocupación.

ーQuería comprar unos tomos, perdón.

Ya, adiós preocupación, hola a tu adorable voz hablando.

ーFue mi culpa, no te pregunté si verías algo más.

ーVamos a pagar entonces.

Sin decir nada más fueron a pagar, casi escupe cuando escuchó el precio de que eligió para el cumpleañero, que tendría su fiesta hasta diciembre.

Tu estabas tranquila con una sonrisa, viéndolo fijamente, su perfil era tan lindo, ese mechón que sobresalía era lindo, querías tocarlo, su mandíbula estaba marcada de manera sutil, y sus ojos rasgados, era guapo, simple de explicar, un hombre demasiado guapo que aparte era tu tutor.

Salieron de la tienda, Suguru por fin respiró, no fue tan malo, admitía que no había sido tan terrible.

Ya no sabía que más decir, simplemente se quedaron parados, viéndose, así, como si estuvieran enamorados, el cosquilleo era cada vez más intenso para el pelinegro, quería agarrarte de las mejillas y plantarte muchos besos.

ーEspero haberte ayudado, Geto-san.

Sacaste algo de la bolsa que te habían dado minutos atrás, dos pequeños mangas. Se los extendiste. Él los tomó un poco confundido.

ーYo no leo mangas.

Fue lo primero que salió de su boca, regresandote los mangas.

ーEstá bien, pero, los compré para ti, Suguru, si no los quieres leer, está bien, pero es un regalo.

Regalo.

Esa palabra resonó en Geto y apretó los mangas contra él.

Primera vez que le decías Suguru, quería que lo repitieras.

ーMe tengo que ir, fue divertido estar contigo. Nos vemos el lunes.

Otra vez yéndote y él sin poder moverse, solo correspondió a la despedida moviendo su mano.

Cuando ya no te vió más, observó el título.

NANA.

Bueno, le daría una oportunidad al manga.

¿Qué podría salir mal?