Ascención: Guerra imperial Galactica

Cap 6: Batalla de Yavin

En Tatooine, los Helghast, se estaban preparando para su primer ataque oficial al imperio, Radec lideraria el ataque junto a Kessler, ya casi estaban listos, pero una llamada de Werner los habría interrumpido.

— Muy mal momento Werner, que pasa — dijo Kessler serio mientras recargaba sus pistolas y afilaba su espada.

— Pues verás, recuerdas esas energías extraña del planeta Orasu de nuestra galaxia — dijo Werner.

— El planeta de los caídos, si que pasa con eso? — dijo Kessler.

— Pues ha habido una creciente energía en ese planeta y Visari me dijo que investigará, fui hace unos días y me encontré con un mineral sorprenden — dijo Werner.

— Mineral, di nombre, propiedades y para que nos es útil — dijo Kessler interesado.

— Las propiedades del cristal son únicas, evitan la oxidación, son muy duros y tiene un control sobre el clima del planeta, más que nada la lluvia llamada mengua — dijo Werner.

— Mengua, esa lluvia que oxida las cosas y hace que envejescamos más rápido.

— Si, pero eso no es lo único, he estado haciendo pruebas y hay una reacción con el ADN y el organismo humano.

— Se me acaba el tiempo, hablamos cuando terminemos la misión, pero antes, como se llama el mineral.

— Su nombre es... Quiralio.

Tiempo después, Cercanías de Yavin 4.

La flota Helghast ya había llegado, Radec estaba viendo lo que pronto sería el campo de batalla, a su lado estaba Kessler que veía también todo.

— Este será un ataque importante, tenemos que tener éxito — dijo Radec serio.

— Lo se señor, yo me ocuparé de las naves, usted encarguese de abordar y controlar la estación — dijo Kessler.

— Es esa una orden a tu superior Kessler.

— No se, lo es — dijo para que Radec y Kessler se rieran.

Solo ellos se entendían y podían hablar con total naturalidad.

— Señor, las unidades automáticas, ya están listas — dijo un soldado para que atrás de él, se viera un escuadrón de droides modelo 9T.

— Perfecto, estás máquinas, me ayudarán en el abordaje, solo tendremos que preocuparnos por las bajas que recibamos en aire con las naves — dijo Radec.