Capítulo Quinto

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El tiempo no perdona, volver atrás no es opción, la oscuridad siempre intentará devorarte, si estás listo para revivir tu pasado, déjate morir.

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La conexión se había llevado a cabo, Sofía, cumpliría con la primera parte, regresar a salvo a la chica que el azabache mencionaba como Paula.

Ambas hermanas, se encontraban en camino hacia una de las manadas que más problemas habían causado.
La manada “Red Moon", desde siempre han estado renuentes a colaborar con los siete grandes señores del mundo. Proclamando contra viento y marea la llegada de la Diosa Luna y sus juicios.

—Es un tanto curioso, la forma en que esa chica fue raptada por la manada “Luna Roja" —expuso Tina, mientras avanzaba a gran velocidad.

—No tengo ni idea, no pude ver nada cuando toque al pelinegro —respondió Sofía.

De algo estaban seguras ambas hermanas, ese “rapto" no fue una casualidad, los Blackmoon escondían secretos, porque nadie podía ser tan cercano a Monserrat, la madre de las dos, y no saber absolutamente nada.
Además sumado a que la señora Blackmoon, había mentido con respecto al tema de las piedras de sangre, debían estar más que atentas.

Martina Blackmoon, una señora pelinegra, con una gran astucia, con sus orbes oscuros como la noche, un tanto alta, más que Tina, había sido hallada mintiendo en presencia de la hermana mayor de Sofía.

Stella Bellorous, la Súcubo era capaz de ver quién mentía ante su presencia, después de la partida de las dos vampiresa, la “chica multicolor" como le había llamado Liam, quedó entablando una conversación con la madre del vampiro azabache, y al ver la falsa preocupaciones de está, no titubeó en darle la información a sus hermanas y hermanos, todos los Bellorous, tenían una forma especial de conocerse, al ser razas puras, la telepatía era su don más común.

—Abra tiempo para resolver ese asunto —repuso Sofía, a lo que la peli-plata solo asintió.

El camino les resultó poco, y en cuestión de un cuarto de hora habían llegado a los límites de la corte solar, y presentándose ante la entrada principal de la manada “Luna Roja".

Los lobos, habían oído maravillas acerca de los encargados de las diferentes cortes, y tenían conocimiento que el palacio del Sol había sido abandonado súbitamente, pero resguardado bajo un hechizo poderos, t cualquiera que intentaré adueñarse del lugar, no volvía con vida.

Y allí junto a la protectora del palacio del Sol, se encontraba la protectora del palacio de la Luna, hacia pocos minutos el alpha, había dado la orden de mantener la formación, se esperaban una multitud de vampiros, incluso Nosferatus bajo el mando de la peli-rubia, pero solo estaban esas dos chicas, la tensión estaba en el aire, muchos cambia formas, querían evitar una lucha innecesaria, pero debían obedecer al alpha o morir por traición.

—Alpha Luxury —hablo la peli-plata, apenas y vió la silueta de dicha persona.

El alpha, uno de los más antiguos, y considerado una de las criaturas originales, con sus cabellos blanqueados por el pasar del tiempo, una mirada penetrante con esos orbes violetas, vistiendo una simple camiseta gris y unos pants, de primera impresión no se le consideraría una amenaza, pero con el trato, su verdadero carácter sale a flote, y mientras se acerca a la barrera que los dividía, todos los allí presentes sabían lo que ocurriría, si alguno de las dos razas, forzaba su entrada a esa tierra sagrada, sería castigado hasta la muerte.

—Las hermanas Bellorous, es un placer verlas —dirigió su mirada hacia la peli-rubia, mientras hacia una sonrisa forzada, que parecía más bien una mueca.

Luz De Luna (En proceso)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora