Enamorada de mi jefe [Katsuki Bakugo y tú]

||Capítulo 12||

||Capítulo 12||

Otro día de trabajo, ella se encontraba revisando varios papeles los cuales eran más y más negocios con empresas de otros países. Aunque algunas eran rechazadas por órdenes de su jefe que sólo le había dirigido la palabra para eso.

– Si pasa algo?

La puerta de mi oficina se abrió dejándome totalmente sorprendida, sus ojos brillaron

– Buenos días _____ –Cerrando la puerta–

– Señor Bakugo ¿Se le ofrece algo? –Dije mientras me levantaba de mi asiento–

– Olvidaste esto es mi carro

Mire su mano derecha donde llevaba una bolsa con la caja de postres de la vez pasada.

– Lo siento mucho

El camino hacia mi escritorio y dejo la bolsa solo para sacar los postres y demás dulces que no conocía.

– Que es eso?

– Son algunos postres que me trajeron y quería compartirlos contigo

El evitaba mi mirada mientras yo veía como seguía sacando varios dulces de la bolsa.

El bajo los papeles de la mesa para colocar los dulces. Todos se veían deliciosos pero raros.

– Toma, prueba este –El tomo mi mano para plantar un dulce–

– Que es esto?

Era suave como una almohada, pero estaba rodeado de algo café.

– Es un dulce de México.

– México?

– Si

Comí aquel dulce y realmente era una deliciosa, aquella cosa café era deliciosa.

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Nadie nunca le habian dado una gran cantidad de dulces la bella chica se sentía tan amada, y especial.

Aquella película era hermosa, una chica de cabellos rubios y largos que quiere cumplir un sueño de ver las linternas que sus padres lanzan para que ella vuelva a casa era hermosa

Las luces de su oficina estaba apagadas, la pantalla de la computadora era lo único que iluminaba, los dulces en su escritorio eran demasiado buenos pero en especial aquel rubio quien la miraba con ojos de amor o más que amor, pues lo que el sentía ya no era amor, ya que eso es solo in sentimiento y lo que el siente por ella es más que un sentimiento.

La hermosa peli_____ Lograba oler el perfume de su jefe el cual le hacía muy bien con el, es como si el perfume fuera para el.

La puerta de la oficina comenzó a sonar

– Adelante –Dijo su jefe mientras le colocaba pausa a la película y prendía las luces–

Una empleada entró comentando que su pedido estaba listo, el solo sonrió y miró a la chica quien seguía sentada tapada con su saco.

– Me tengo que ir

– Si –Apunto de quitarse el saco–

– Quedatelo

Dicho esto salió de su oficina dejandola totalmente feliz pero triste, ella quería pasar un rato hermoso con el, pero comprendía que el era hombre divorciado y ella una chica soltera.

Volvió a apagar las luces y dejar reproducir su película

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Aquel saco olía genial, ella no quería soltarlo, quería tenerlo con ella para siempre.

El clima era perfecto, aquel café, el saco, todo era increíble, nunca pensó que regresar a casa fuera tan tranquilo, los carros pasaban pero no muy seguido y eso le daba seguridad.