Contraataque

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Después de tomarle el pulso, Song Jiaren dijo fríamente: "¡No tienes que preocuparte por mi familia! Liu Changfeng fue envenenado. Cambiar su corazón sólo puede prolongar su vida. Incluso si cambiara de opinión, no viviría más de diez años".

Cuando vio por primera vez a Liu Changfeng, sintió que era muy extraño. Después de tomarle el pulso, estuvo muy seguro de que había tomado veneno durante todo el año para volverse así.

El dolor y el odio se cruzaron por los ojos de Liu Baisheng cuando dijo: "Lo sé. Cambiaré su corazón para prolongar su vida durante diez años. No dejaré que Changfeng muera".

Los ojos de Liu Changfeng se llenaron de desgana. Le dijo a Liu Baisheng: "Padre, gracias".

Song Jiaren sonoro y se sentó en el sofá. Miró a Liu Baisheng, pero no era menos imponente que él.

Dijo con confianza: "Liu Changfeng no necesita cambiar de opinión. Puedo salvarlo".

Liu Baisheng miró a Liu Changfeng y una mirada extraña cruzó por sus ojos.

"Eres sólo una niña. ¿Y qué si has estudiado medicina durante unos días? Changfeng ha visto a muchos médicos famosos, pero no pueden salvar a Changfeng. ¿Puede?" Dijo Liu Baisheng con desdén.

Song Jiaren sacó una aguja plateada y centró su atención en tratar a Liu Changfeng.

Liu Baisheng miró en silencio y no la detuvo.

Una hora más tarde, Song Jiaren sacó la aguja plateada y tomó un bolígrafo y papel de la mesa para escribir una receta.

Secó el sudor de la frente y dijo: "Conozco tus intenciones. Se necesitará medio año para que su veneno sea tratado por completo. En el primer medio mes, debe ser tratado con agujas plateadas todos los días y, después, debe ser tratado con agujas plateadas cada medio mes. ¡Ahora quiero ver a Song Chuyan!

Song Jiaren lo había pensado detenidamente. No querían vengar a Liu Meifeng. Su objetivo era tratar a Liu Changfeng.

Sabían muy bien sobre sus habilidades médicas, pero fingieron no saberlo. Hoy, Song Jiaren había sido engañado por ellos.

Liu Changfeng se levantó y estiró su cuerpo. Dijo sorprendido: "¡Padre, me siento mucho mejor!".

Había una pizca de emoción en los ojos de Liu Baisheng. Le sonrió a Song Jiaren y dijo: "La señorita Song es realmente una doctora genial. Mientras puedas tratar la enfermedad de Changfeng, puedo aceptar cualquier cosa".

Gritó hacia la puerta: "Mayordomo Liu, lleve a la señorita Song a ver a Song Chuyan y arregle la mejor habitación para que descanse".

Song Jiaren no dijo nada y siguió al mayordomo Liu.

En el estudio.

Liu Baisheng dijo con saña: "Liu Meifeng es bastante útil. Su madre te ha envenenado durante tantos años. ¡Incluso yo quería matar a Liu Meifeng para vengarte!

Liu Changfeng dijo: "Liu Meifeng ya está muerto. Padre, no te enfades".

Liu Baisheng le entregó la receta y dijo: "Dígales a los sirvientes que consigan la medicina. Envía a alguien para que siga a Song Jiaren. No bajes la guardia".

Liu Changfeng asintió y salió del estudio después de recibir la receta.

Song Jiaren siguió al mayordomo Liu. Estaba furiosa. El padre y el hijo estaban jugando con ella. Ella no podía simplemente dejarlo pasar.

El mayordomo Liu aún no tenía treinta años, pero parecía sensato. Se detuvo en la puerta de una habitación, la abrió y dijo respetuosamente: "Señorita Song, Song Chuyan está en la habitación".

Song Jiaren entró en la habitación y vio a Song Chuyan acostado en la cama con una bata de hospital. Tenía los ojos cerrados y la cabeza envuelta fuertemente en una gasa.

Caminó hacia su lado y lo llamó por su nombre dos veces, pero no hubo respuesta. Ella frunció el ceño y extendió la mano para tomarle el pulso a Song Chuyan. Cuando se dio cuenta de que él sólo estaba inconsciente y que se despertaría en medio mes, se relajó.

Miró el rostro de Song Chuyan y suspiro. Ella dijo: "Song Chuyan, después de que te vayas a casa, no hagas enojar a mamá".