Contraataque

36

Song Jiaren salió de la sala y siguió a la figura. Vio una figura sentada en el suelo en un cuarto de servicio abandonado. Como estaba de espaldas a ella, no podía ver lo que estaba haciendo esta persona. Ella gritó: "Wang Lin".

Cuando Wang Lin escuchó la voz detrás de ella, su cuerpo tembló de miedo. Lo que tenía en la mano cayó al suelo y también cayó el polvo blanco de la bolsa transparente.

Song Jiaren la había perseguido porque vio que su expresión era anormal, pero no esperaba ver tal escena.

"¿Estás tomando drogas?"

El cuerpo de Wang Lin tembló y su rostro se llenó de dolor. Era obvio que su adicción a las drogas estaba empeorando. Abrazó la pierna de Song Jiaren y le suplicó: "Señorita, por favor no se lo diga a Yifan. No quiero que Yifan sepa sobre esto. Por favor."

Mientras hablaba, fue a recoger la droga esparcida por el suelo. Song Jiaren la miró fríamente y dijo: "Cuando termines, sal. Tengo algo que preguntarte."

Unos diez minutos después, Wang Lin salió de la tienda de provisiones. Se veía mucho mejor que antes. Bajó la cabeza y no se atrevió a mirar a Song Jiaren.

Song Jiaren preguntó: "¿Cuánto tiempo ha pasado?"

"Tres meses", respondió ella.

Song Jiaren estaba incrédulo. "¿Cómo tienes el dinero para tocar esta cosa?"

Una mirada de odio cruzó por los ojos de Wang Lin mientras contaba toda la historia. "Todo es gracias a Song Yoyo. Ella me incriminó y me metió en las drogas para poder controlarme y obligarme a hacer cosas malas por ella. Pero después de que te ayudé a obtener el certificado la última vez, ella se negó a darme drogas nuevamente".

Song Jiaren frunció el ceño y preguntó: "Entonces, ¿por qué sigues ayudándome?"

Wang Lin inmediatamente se arrodilló en el suelo y dijo: "Señorita, sé que me equivoqué, pero no puedo dar marcha atrás ahora. Song Yoyo quiere que Yifan también consuma drogas. No puedo soportar esto, así que... Señorita, por favor, ayúdeme. Por favor cuida de Yifan. Ya no tengo cara para verlo".

Fue sólo entonces que Song Jiaren se dio cuenta de por qué su solicitud de testificar por última vez fue para cuidar bien de Wang Yifan.

"¿Qué pasa contigo?" Quería decir que podía ayudarla a enviarla a rehabilitación.

Wang Lin sacudió la cabeza y dijo: "Señorita, tengo algo que quiero hacer. Mientras cuides de Yifan, estaré tranquilo".

Miró fijamente a Song Jiaren para ver si realmente podía cuidar de Wang Yifan.

Song Jiaren asintió. "Si necesitas ayuda, puedo ayudarte".

Wang Lin sonrió agradecido y dijo: "Señorita, Yifan podrá someterse a una cirugía en unos días. Podrá ver cosas después de la cirugía. A él realmente le gustas, así que te lo entregaré".

Dicho esto, hizo una reverencia ante Song Jiaren y se fue sin mirar atrás.

En el momento en que Wang Lin se dio la vuelta, se secó las lágrimas de los ojos. Ya no había ningún rastro de debilidad en sus ojos. Se fue con determinación y odio.

Song Jiaren, sintiéndose un poco molesto, suspiró. Ella mejoró su estado de ánimo y regresó a la sala. Wang Yifan estaba sentado obedientemente en la cama. Incluso si no podía ver, obstinadamente giró la cabeza para mirar por la ventana, como si eso le permitiera entrar en contacto con la luz del sol.

Cuando escuchó pasos, se dio vuelta y sonrió. "Estás de vuelta."

Song Jiaren se detuvo en seco y dijo: "Sí, ¿aún recuerdas mi número?".

Wang Yifan no sabía por qué preguntó esto, pero aun así asintió y dijo: "Lo recuerdo".

Song Jiaren luego dijo: "Puedes llamarme si necesitas algo en el futuro. Regresaré dos días después de tu cirugía".

Wang Yifan quedó atónito. Luego, dijo alegremente: "Eso es genial. Mi hermana también estará muy feliz".

Song Jiaren no sabía si era correcto ocultárselo. Además, este asunto probablemente no podría ocultarse. Si Wang Lin no apareciera por mucho tiempo, definitivamente sospecharía.

Song Jiaren lo pensó y dijo: "Wang Lin, ella... ella se fue al extranjero por un período de tiempo".

Wang Yifan exclamó: "¿Cómo puede ser eso? ¿Por qué no me lo dijo?"

"Existe la oportunidad de estudiar en el extranjero. Es precioso, pero tiene que partir de inmediato. Ella me pidió que te lo dijera", dijo Song Jiaren.

Wang Yifan no tuvo ninguna duda y dijo: "Debe ser porque la Hermana Hermosa le dio una oportunidad a mi hermana".

Song Jiaren no refutó. Miró al inocente Wang Yifan y sintió lástima por él.