Quien se atreve gana -HIATUS-

Capítulo 12: El movimiento

Durante un jueves por la tarde, el Caldero Leaky estuvo más ocupado de lo que Marcus Flint lo había visto en bastante tiempo. Hoy no fue un jueves ordinario, por supuesto, dada la sesión de emergencia del Wizengamot que acababa de terminar. Incluso ahora, los rumores y las historias medio escuchadas se filtraban por el pub, y probablemente aún más.

Se dijo que podía quejarse de política en el Leaky, y que Rosmerta en los Tres Escobas se burlara de su queja antes de cerrar la boca. Ningún hechizo podría igualar la velocidad de un rumor en Wizarding Britain.

Por supuesto, el padre de Marcus no quería tener nada que ver con los rumores de hoy. Él y sus asociados habían sacado una habitación privada arriba, donde estaban ocupados planeando cómo responder a los eventos del día. Marcus tuvo la tarea de vigilar las idas y venidas a continuación, en caso de que algo sucediera.

La convocatoria temprana había sido una sorpresa, al igual que la nota apresuradamente garabateada. Cuando Marcus se enteró de lo que había sucedido, tenía sentido. House Flint no había estado involucrado en una disputa de sangre en siglos, pero ahora estaban en medio de ella. Su padre se estaba tomando la amenaza en serio, al menos, y Lord Flint nunca fue demasiado cauteloso, lo que le dijo a Marcus exactamente lo preocupado que estaba realmente su padre.

"Una sesión bastante buena, ¿no?" Marcus levantó la vista para ver a Ambrose Rookwood tomando asiento en su stand, una cerveza de mantequilla ya en su mano.

Flint sacudió la cabeza. "Nunca te cansas de hacer eso, ¿verdad?"

Ambrose le dio a su amigo una mirada inocente. "Haciendo qué, exactamente?" Los antiguos compañeros de casa se rieron de la vieja broma y se dieron la mano.

"Es bueno verte, Rookwood", dijo Marcus. Su rostro cayó, al recordar lo que había sucedido la semana anterior. "Perdón por tu padre."

"Gracias, Flint", respondió Ambrose sinceramente. "Supongo que las cosas no salieron bien hoy?"

"No estoy seguro", respondió Marcus. "Harry Potter declaró una disputa de sangre sobre el Señor Oscuro y sus aliados."

"Él hizo?" Los ojos de Ambrose se estrecharon al considerar las ramificaciones de tal declaración. Flint sonrió ante la expresión, porque le dijo a cualquiera que conociera a Ambrose Rookwood que había hundido los dientes en un problema. Muchas serpientes se habían burlado de Ambrose por pertenecer a Ravenclaw, pero solo hasta que lo conocieron.

Marcus sabía que Ambrose Rookwood era tan astuto como venían. Lo cual era parte de por qué se reunían hoy, después de todo.

"Por eso fueron al Ministerio", dijo Ambrose, casi para sí mismo. "Cómo sabría Potter que estarían allí?"

"Por encima de mi nivel, Rookwood", respondió Marcus. "Se suponía que Malfoy recuperaría algo del Departamento, y no vino preparado para una pelea."

Ambrose frunció el ceño ante eso. "Malfoy, entiendo, siempre ha estado demasiado confiado. Los Lestranges también, según el Padre. Pero no es como si papá no estuviera preparado."

"No lo sé", dijo Marcus. No había estado al tanto de la operación hasta que todo terminó, y luego se le encargó la limpieza. Esa tarea era parte de por qué estaba aquí, ahora, sentado en esta mesa.

La mirada lejana permaneció en la cara de Ambrose, y Marcus sonrió a pesar de sí mismo. En lugar de interrumpir el tren de pensamiento de su amigo, sacó un sobre de su túnica. Poniéndolo sobre la mesa, se lo deslizó a Ambrose, quien lo miró de cerca. El pergamino fino estaba sellado con cera verde, el motivo de la serpiente era tan obvio como sutil.