Chica Ordinaria || Roier

1. Golpe

La verdad no sé cómo me deje influenciar por Vivi para terminar este lugar.

Ella no quería venir sola a su primer ComicCon, aunque era una de las invitadas más esperadas junto a su hermana y amigos.

Yo no comprendía muy bien su mundo de fama, pero la apoyaba, éramos mejores amigas desde la primaria.

Teníamos gustos muy distintos, pero nos llevábamos de lo mejor, nunca peleabamos, la considero mi hermana de otra madre.

—Quedate conmigo en el Meet & Greet — menciona la rubia y niego rápidamente.

—No, Vio, sabes que no me gusta eso — menciono — Voy a dar una vuelta por aquí y tú me avisas cuando termines.

—Está bien, pero no te alejes.

Sonreí, pero ella sabía que eso iba a pasar.

Nos separamos y recorrí todas las instalaciones.

[...]

Me había quedado sin batería y ya había ido al lugar donde se suponía que estaba  Vivi, pero nunca la encontré.

Me estaba desesperando un poco.

Esto me pasaba por haberme alejado mucho.

Salgo del edificio y miro a mi alrededor, había mucha gente como para tomar un taxi aquí en la entrada.

Decidí dar la vuelta al edificio, recordé que había un callejón que llevaba a la otra calle, aunque sola ser peligroso porque no pasaba casi nadie por ahí.

Tomé el riesgo, porque si no nunca iba a salir de este lugar con toda esa multitud.

Agradecía que fuera de día aún, aunque muy pronto iba anochecer, aparte no había nadie.

Repase mi plan de nuevo, llegar a la principal, encontrar un taxi, ir al departamento y dormir para mi turno de la mañana siguiente.

Iba con calma cuando una puerta se abrió y no me dió tiempo a retroceder ya que estaba justo frente a mi.

Cai al suelo al golpearme con el metal en la cabeza.

—¡No puede ser! — grita un chico.

Llevo mi mano a mi cabeza y por unos segundos mi vista se desenfoca, hasta que capta a la persona que está frente a mi.

Un chico de gorra y lentes, parece un padre por la vestimenta con la que anda, pero en realidad se ve de mi edad y dudo mucho que tenga hijos.

—¿Estás bien? — pregunta.

—Eso quisiera — contesto.

Él extiende sus dos manos y las tomó para levantarme del suelo.

Se quita los lentes negros y veo su rostro por unos segundos, sentía que lo conocia de algún lado.

—¿Tu...

El chico de gorra pone su mano en mi boca.

—Por favor no grites mi nombre — menciona.

Frunzo el seño y quitó su mano de mi boca.

—Te iba a preguntar que porque salias por ahí, ¿Por qué gritaría tu nombre?, Ni se quién eres — comento

Vuelvo a agarrar mi cabeza con mi mano derecha al sentir el dolor de nuevo, ese golpee fue muy fuerte.

—¿No me conoces? — pregunta con sorpresa.

—¿Debería?

—Pues de seguro vienes de la ComicCon — me mira incrédulo — ¿Segura que no me conoces?