Capítulo 1

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Narrador Omnisciente

Pongan la melodía por favor

Una hermosa caja de música estaba sobre una mesa tocando música suave y apacible. Finalmente se cerró y una mujer lo recogió y lo guardó en su bolso antes de salir de la habitación. Salió y subió a un carruaje muy elegante que la llevó por la calle

"Hubo una época, no hace mucho tiempo, en que vivíamos en un mundo encantado de elegantes palacios y grandes fiestas"

El carruaje se detuvo dentro de una gran puerta magnífica, que conducía a un enorme y hermoso palacio.

"Era el año 1916. Y mi hijo, Nicolás, era el Zar de la Rusia Imperial"

Dentro del Palacio, se estaba llevando a cabo una gran fiesta. Había docenas de invitados en la pista de baile y todos estaban vestidos con ropa elegante. En el frente, un niño bailaba con su padre, mientras su madre observaba, aplaudiendo.

"Celebramos el tricentésimo aniversario del reinado de nuestra familia"

El niño pequeño juguetonamente sacó la lengua y se separó de sus padres y subió las escaleras.

"Y aquella noche, ninguna estrella brillaba con más intensidad que mi dulce Alexey. El más pequeño de mis nietos"

Alexey se apresuró y le entregó un dibujo a su abuela. Detrás de ellos, un joven llamado Dimitri los miraba, sosteniendo la mano de una niña con cabello color café y ojos color miel 

Su hermana pequeña TN había querido ver la fiesta y Dimitri logró colarlos a ambos para que ella pudiera admirar la fiesta

TN:¡Demy! ¡Mira! --Señaló todas las hermosas decoraciones y las personas vestidas con trajes elegantes- ¡Es todo tan bonito! --Salta sobre los dedos de los pies con entusiasmo--Ojalá pudiera ser una princesa

Dimitri se rió de su tonto comportamiento. 

Dimitri: No te preocupes TN. Algún día serás una princesa

TN:¡¿De verdad?! ¿Crees eso?

Preguntó, sus ojos se abrieron como platos.

Dimitri: Por supuesto que sí.

Él sonrió y besó su mejilla mientras ella reía.

Alexey miró por encima del hombro de su abuela y notó a la joven. La había visto por el Palacio un par de veces, y siempre pensó en invitarla a jugar con él, pero ella siempre parecía desaparecer cuando él intentaba acercarse a ella.

Los ojos de TN se posaron en los de él y dejó escapar un pequeño grito ahogado, temerosa de estar en problemas por estar aquí. En cambio, Alexey se sonrojó y le dedicó una cálida sonrisa. Ella le devolvió la sonrisa y saludó.

"Alexey me suplico que no volviera a París. Y mandé hacer un obsequio especial para él. Así la separación seria menos dolorosa para los dos "

 La Emperatriz Marie sacó la pequeña caja de música y se la tendió.

Alexey: ¿Para mí?  ¿Un alhajero, abuela?

De repente, un mayordomo vio a Dimitri y TN

Mayordomo:¡¿Qué están haciendo ustedes dos aquí arriba?! ¡Su lugar es la cocina!

Una vez en diciembreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora