➤ 14. Lágrima

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Masky

Sentía mi cara arder, mi garganta me dolía y la cabeza me estaba matando; sin embargo, tenía que ir al funeral junto a la niña. Brian me abrazaba mientras que Toby sonreía de oreja a oreja, ya sabía por qué estaba así.
Con mi cara le dije todo, no tenía que decir ni pío.

Por eso me puse firme, no podía dejarme ahí tirado. Me levanté para tomar mi casaca, iba a acompañar la niña.

—¿Estás seguro de ir? Creo que sigues con un poco de calentura eh— preguntó Toby con un cierto sentido de humor, me molesté

—¿Qué hablas? Estoy perfecto—gruñí mientras me sobaba el cuello

Me avergoncé por cómo ________ me había encontrado, pero ya no podía hacer nada, me había visto la cara, en realidad le vió la cara a todos nosotros, los Proxys, eso era algo malo ¿No le molestaba ver la horrenda y asquerosa cicatriz de Toby?

La niña tomaba sus cosas mientras que se limpiaba la falda por el barro, se había ensuciado toda, solo por venir a verme. Sacó un paquetito de tu mochila y me lo tendió, me extrañó su acción. 

—¿Qué es? ¿Es comida?—Pegunté mientras tomaba el protésico

—Es para tu fiebre Tim, estás ardiendo, no es buena idea que me acompañes— bufó

—¿Y dejarte con Toby? Quien es el más capaz a que sea atrapado y te usara como rehén para así escapara.... No lo creo— respondí riendo

—Te escuché ¿Sabes?— dijo molesto el castaño

—Lo dije para que escuches imbécil, no más mira cómo la trajiste, está lleno de barro su uniforme

—¿Y? Estaba preocupado, pensé que morías Jefe— explicó

—Me hubieran dejado morir— susurré

—¡Ya! basta, no entiendo el propósito de esta pelea, pero la chica tiene razón, estás enfermo Masky, yo iré con la niña al evento— sugirió Brian y yo salté por inercia

—Ni lo creas hermano, casi la violas, además mira, te ve y tiembla la chiquita— señalé a _________ quién tenía una cara de pánico y ojos de presa

—¡Masky! Ya, silencio, iré sola se quejó

Se dirigió a la puerta podrida y la seguí, sin q me importara no llevar mi máscara, mi único antifaz. 

Finalmente la alcanzé, aún con fiebre y dolores de pecho, soy más rápido que ella. Tenía su blusa blanca medio sucia por el polvo, yo cabello mal peinado y sus zapatos de vestir estaban llenos de barro, aunque igual una parte de su falda tenía barro.
Su mochila montada también estaba sucia, espero que sus libros estén a salvo

—¡Oye! Espera niña ¿Qué haces? —Le tomé del hombro

Ella solo me abrazó por el cuello, me ensució mi camisón blanco, pero no me importó, la abracé por la cintura y ella escondió su rostro en mi cuello, olía rico, a vainilla con algo de flores.

—Nunca más vuelvas a dejarme, si quieres enfermarte hazlo en la casa, no aquí, solo en medio de la nada— murmuró alto en mi cuello, su aliento caliente impactó en mi piel, la cual se erizó

—¿Qué dices? No estaba solo ________, tenía a mis amigos —me excusé mientras le acariciaba el cabello, se veía suave, quisiera tocarla sin usar guantes

—Sí, pero no tenían idea de cómo ayudarte, sé que no ayudé mucho, pero prometo conseguirte pastillas, pudiste haberte infectado un órgano

Reí por la tontería que había dicho ¿A caso eso era posible?

MASKY Y TÚ (Westfield)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora