viii

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minho consideraba que era muy pronto y temprano para tener otra de sus crisis, pero realmente fue inevitable. no lo podían culpar cuando, al día siguiente, hyunjin insistió en que vuelvan a dormirse, esta vez en su cama, luego del desayuno.

por supuesto que minho accedió y así lo hicieron.

ahora, minho necesitaba ir al baño, pero el fuerte agarre en su cintura le estaba dificultando la tarea de salir de la cama. y realmente le encantaría quedarse así, pero el deber llama.

y estaba a punto de despertarlo con una patada, pero otra vez esos labios lo llamaban haciendo un puchero, ese que minho tanto odia porque era tan tan tentador.

suspiró frustrado, juntando sus frentes y rozando sus narices. con su mano izquierda trazó con delicadeza el rostro ajeno. estaba conteniendose con todo lo que podía.

— ¿por qué me haces esto? —susurró enojado con hyunjin por ser tan hermoso, ugh.

y si... solo es un pequeño piquito, un toquecito..., minho pensó, cediendo.

y lo hizo. cerró sus ojos fuertemente y terminó de eliminar la poca distancia que quedaba entre sus labios y los de hwang.

apenas fue un toque estático de unos milisegundos, pero minho sintió tantas cosas. su corazón latía con tanta fuerza que le dolía el pecho. abrió sus ojos lentamente al separarse y sintió que se le bajó la presión al ver los ojos de su amigo abiertos, mirándolo. entró en pánico.

— hyun, yo- —no pudo decir más y pensar en nada más porque hyunjin fue quien cortó la distancia entre ellos esta vez.

ahora se besaban como debían, con sus labios danzando en una sintonía que era solo de ellos, al compás de sus agitados corazones. las mariposas en el estómago de minho formaron huracanes al sentir la suavidad de los belfos ajenos, logrando saborear un poco del café que tomaron en el desayuno. estaba a punto de enloquecer.

minho maldijo una y otra vez al aire por necesitarlo cuando se separaron lentamente. y, nuevamente, se puso nervioso, negándose a volver a abrir sus ojos, con miedo de lo que pasaría si los abría.

— hyung, mírame. —le pidió el rubio con delicadeza, acariciando la mejilla del mayor.

inhala, exhala. y abrió sus ojos, lentamente, con temor.

no sabía cómo describir su vista en estos instantes, con hyunjin mirándolo fijamente con una sonrisita, esa que enloquecía a minho. no entendía, ¿qué significaba esa mirada?

— minho, también me gustas.

— minho, también me gustas

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😨😨😨 está pasando está pasando (ya casi termina el fic) y tal vez hoy más tarde suba el siguiente cap jeje

sleeping prince + hyunhoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora