Las Llamas de la Mentira

Capítulo 2

𝙴𝚝𝚊𝚙𝚊 𝚞𝚗𝚘, 𝚗𝚎𝚐𝚊𝚌𝚒ó𝚗.

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Effie se acercó a Haymitch. Peeta y Katniss estaban dormidos en el dormitorio, luego de las entrevistas. Era temprano, aunque ya había anochecido. Haymitch se preparaba para irse a dormir a su respectiva habitación.

—Haymitch, ¿Podemos hablar... en privado?

Haymitch asintió con la cabeza. Effie y Haymitch caminaron a un pequeño cuarto donde tendrían privacidad para hablar.

—Tengo buenas y malas noticias, ¿Cual quieres escuchar primero?

—Quiero escuchar la buena, ahora mismo tengo buen humor.

—La buena es que esta mas que confirmado que pospondrán los juegos hasta que Katniss de a luz.

—Mmm, ¿y cual es la mala? —preguntó Haymitch, cuyo humor estaba bajando de alegre a amargo.

—Cuando Katniss de a luz, ellos volverán a la arena, ni un día más, tendrán que volver al Capitolio el día del nacimiento del bebé. Además, escuche algo terrible. Dos agentes de la paz hablaban sobre que Snow quiere hacerle una prueba de embarazo a Katniss —dijo Effie con voz apagada—. ¿Que le diremos a Katniss?

—Decirle la verdad, y bueno... —Haymitch miró al suelo.

—No podemos obligar a que se embarace. Apenas tienen 17 años, ¡son unos niños!

—Lo se. Ese maldito de Snow quiere el show completo.

Effie miró al suelo, conteniendo algunas lágrimas, siempre había sido muy emocional pero no lo demostraba, siempre había tratado con indiferencia a los tributos pero esta vez era diferente, ella había roto su código de no encariñarse, y eso le estaba afectando.

—Son solo niños. —Susurro Effie. Aunque ella tenía una opinión neutra del Capitolio y los distritos, no podía mentirse a sí misma. Katniss y Peeta solo eran unos niños, sin importar que el próximo año cumplirían 18 años. Ellos sólo tenían 17 años, y sin importar que hipotéticamente fueran mayores de edad, no estaban preparados para la carga emocional de un hijo, sin Importar que estuvieran bien económicamente y tuvieran apoyo. No podían obligarlos.

Haymitch hizo el intento de abrazar a Effie, no era algo natural en ellos demostrarse vulnerables mutuamente de esa manera tan íntima, pero no podían evitarlo, se habían encariñado con sus tributos y había muchas probabilidades de que todo resultara mal.

Effie apoyó su cabeza en el hombro de Haymitch. No eran amigos, y aunque tenían una dinámica complicada, se lograban entender.

—Haré lo posible para protegerlos —dijo Haymitch, intentando consolar a Effie.

Effie se separó de Haymitch y le sonrió levemente. Luego se dio cuenta de lo cerca que estaban.

—Espero que así sea. No me perdonaría si algo les pasara. Debes prometerme que los protegerás.

—Lo prometo.

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A la mañana siguiente.

—Si no han cancelado los juegos, y todavía siguen en pie, debo decir que no quiero aliados. Contigo me basta —le susurró Katniss a Peeta.

—Está bien, pero, espero de verdad que cancelen los juegos este año.

Katniss lo miró, soltó un suspiro cuando alguien tocó la puerta, un Avox indicando que el desayuno estaba servido, esa era la señal de que Peeta debía irse.