Aunque el clima es frío, nuestros corazones arden con pasión, podemos mantener nuestros cuerpos cálidos bailando al compás de nuestros silencios de amor.
Juntos en la pista, no importa el frío que esté afuera, nuestros cuerpos se acercan, y la música nos envuelve.
Con cada movimiento, nuestros corazones latiendo al unísono, y nuestros susurros silenciosos hablan de un amor eterno.
El calor de nuestras miradas, se intensifica con cada giro, y aunque el clima es frío, nuestro amor es un fuego radiante.
Al ritmo de la música, nuestros cuerpos se funden, y en el abrazo de nuestro amor, sentimos el calor de dos almas ardientes.
Así bailamos juntos, en la fría noche de invierno, manteniendo nuestros cuerpos cálidos en el fuego ardiente de nuestro amor eterno
-Alex
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Ecos Del Alma
LosoweEn el umbral de estas páginas, se abre un portal hacia lo más profundo del ser. Aquí, cada palabra es un susurro del alma, cada verso un latido que resuena con la esencia misma de la existencia. Los ecos que habitan en estos poemas son reflejos de...
