Epílogo : El castillo de la pureza

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La fiesta del décimo cumpleaños de Estella pudo realizarse  en Central Park después de pedir los permisos correspondientes, desde temprano Nigel y Adam llegaron al parque y pusieron una mesa con bocadillos, soda y muchos dulces, además de decorar todo con motivos de unicornios, los cuales se habían vuelto la obsesión de la niña en las últimas semanas y sólo hablaba de querer usar el vestido de "princesa unicornio" en su fiesta, para medio día los invitados habían llegado, un montón de niños que eran los nuevos compañeros y amigos de la escuela de Estella, incluso Darko llego temprano de la mano de sus hijos, un par de gemelos de seis años

- ¿donde dejo los regalos? "Papá unicornio" -

- jódete, no me vuelvas a llamar así - le respondió Nigel

- ¡Nigel! No digas groserías aquí, no frente a tantos niños - se quejo Gabi, quien estaba cerca - gracias por los obsequios Darko, yo los llevare a la mesa de regalos -

- ¡Gabi! Pero cuanto tiempo sin verte, te ves hermosa -

- gracias, tu también te ves muy bien ¿ellos son tus hijos? -

- si, son Danny y Mitch, mi orgullo...mi esposa se disculpa por no poder asistir, pero ya sabes, el parto esta próximo y prefiere reposar, se cansa mucho al salir  -

- no hay problema, saludala de mi parte y felicidades a ambos por el nuevo bebé -

- gracias, de tu parte -

- niños ¿quieren ir al brincolin? -

Los niños gritaron emocionados mientras Gabi los llevaba a los juegos y dejaba los regalos en la mesa, dejando a Nigel y Darko hablar a solas

- Gabi se ve...muy feliz, hacía años que no la recordaba así -

- si...debo admitir que el tarado de Charlie la trata bien, incluso Estella lo adora y ni que decir del viejo Viktor, es el más feliz con esa relación, a Gabi le ha ido bien con el divorcio, bien por ella, se lo merece -

- pues no es la única ¿donde esta Adam? -

- alimentando a los mapaches -

Le señaló al otro lado del parque donde en efecto, Adam tenia a sus pies a un par de mapaches que se paraban en sus dos patas y le recibían las galletas

- ja, ese Adam es un caso especial -

- si, es... único - dijo con una leve sonrisa mientras lo miraba

- basta, no puedo con tu cara de bobo -

- ¿que? -

- lo miras y parece que se te va a escurrir la baba -

- no es cierto -

- si es cierto, viéndote así nadie creería que eres el terror de Bucarest -

- ya no más, deje esa vida atrás...ahora solo soy un hombre ordinario y padre de familia, mi vida es todo lo que deseé ahora, tengo a Adam, a mi niña, no necesito más -

-¿ y tu mamá? -

El semblante de Nigel se ensombrecio un momento

- no lo sé, hace meses que no la veo, la última vez que nos vimos le deje las cosas bien claras, si ella no acepta mi relación con Adam no me está aceptando a mi -

- ya, entiendo - dijo Darko dándole unas palmadas en el hombro - no te pongas así, lo siento -

- no es tu culpa, y ya, dejemos ese tema de lado, hoy es el día de mi niña y no quiero pensar en esas cosas -

- cierto, tomemos una cerveza -

- es fiesta infantil idiota, no hay cerveza...pero te invito un batido de arcoiris -

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